Dos estudiantes, de 18 y 20 años de edad fueron detenidos en la mañana de este miércoles en sus casas de Balcarce acusados de distribuir pornografía infantil desde sus cuentas en redes sociales.
En una operación de la Sub DDI Balcarce, a cargo del comisario Maximiliano Blanco Río, allanaron una vivienda de 21 entre 44 y 46 y otra en 37 entre 12 y 14, donde se secuestraron teléfonos celulares, computadoras, notebook, elementos de almacenamiento.
La causa que investigó el fiscal Rodolfo Moure se inició tras realizar una investigación informática y de campo, a raíz del reporte realizado tiempo atrás por la National Center for Missing & Exploited Children, donde se dio cuenta que dos cuentas de la ciudad de Balcarce habían distribuido material pornográfico en el que se observaba imágenes explicitas de niños de muy corta edad realizando diferentes prácticas sexuales, según consignó lacapitalmdp.
Es así que el Ministerio Público Fiscal promovió el inicio de una investigación caratulada “Produccion, comercialización, etc. de representación de menores de 18 años dedicados a actividades sexuales”, y designó a la fuerza de seguridad para el esclarecimiento del delito denunciado.
Tras reunir la información pertinente a los investigadores les fue posible establecer la identidad de los usuarios desde donde originara el tráfico de pornografía infantil, como también el domicilio.
Con la cantidad de pruebas alcanzadas es que la Jueza de Garantías, María Lucrecia Bustos, autorizó el operativo que terminó con la detención de los balcarceños.
Un dato llamativo es que hacía diez días atrás otro joven estudiante del distrito había sido aprehendido por un hecho de similares características.
Los aprehendidos fueron conducidos a la Sub DDI, donde se lo notificó de la conformación de una causa penal por el delito mencionado que estipula una pena de hasta cuatro años de prisión y quedó a disposición de la justicia.
Dicho Centro Nacional trabaja monitoreando en tiempo real las diversas redes sociales que se encuentran actualmente vigentes, a los fines de frenar la propagación del delito de actividades sexuales en las que resultan victima los menores de 18 años. También llevan a cabo la vigilancia de la deep web, lugar este último dónde suele haber un mercado negro en el cual se comercializan desde fotos pornográficas de menores hasta venta de menores para su explotación sexual.
