En el marco de la segunda ola de la pandemia de coronavirus, desde Zona Sanitaria VIII destacaron la importancia de realizar la mayor cantidad de controles posibles en General Pueyrredon, haciendo énfasis en las fiestas clandestinas, para que no se sature el sistema de salud, en el marco de la segunda ola de la pandemia de coronavirus.
Su director ejecutivo, Gastón Vargas, consideró que antes del cierre total por nueve días anunciado por el Presidente el jueves pasado, en el partido había una Fase 3 “con alguna restricción, como los cierres de gimnasios y natatorios”, pero que él los veía “funcionando normalmente”, según consignó elmarplatense.
En este sentido, también se refirió a las reuniones sociales y agregó: “Hay control, seguramente. Se clausuran diez, ocho, fiestas que se generan los fines de semanas, pero sabemos que habrá otras que no. Controlar que se cumplan las medidas es garantizar la situación sanitaria”.
“A mayor circulación de gente, mayor posibilidad de contagio y, ahora con la presencia de nuevas cepas sabemos que son un 70% mayor contagiosidad y un 30% mayor posibilidad de presentar síntomas graves. La única medida efectiva es disminuir la circulación de la gente”, destacó.
Por otro lado, en relación al aumento de los contagios en la Región Sanitaria VIII, manifestó: “Venimos transitando esta segunda ola con una cantidad de casos importante en todos los distritos. Hoy, en la región tenemos 10.740 casos activos, que ponen en tensión los sistemas sanitarios de los diversos municipios y, particularmente, en General Pueyrredon hay 4215 casos”.
“El sistema de salud de General Pueyrredon, que es distrito cabecera, tanto de la parte privada, pero sobre todo de la parte pública, debe dar respuesta a lo otros quince municipios que integran la región. Por eso, muchas veces, cuando se entra en la discusión de cuántas camas quedan, uno lo tiene que hacer en función de la región y no solo la ciudad”, explicó.
En tanto, sobre la ocupación de camas del distrito, informó: “Hoy estamos en un 72%, este martes estábamos en un 76%, y hay días que baja hasta a un 65%. Todo depende de cómo se van ocupando las camas y cómo se van presentando estos desenlaces, ya sea por alta o por óbitos”.