El hombre de 68 años fue hallado sin vida en el baño de un neuropisquiátrico, aparentemente, por causas naturales. Pero cuando lo velaban hallaron marcas en su cuello compatibles con asfixia manual. «Él estaba bien ahí, no sabemos qué pudo haber pasado», contó una familiar luego de pedir justicia y exigir que se esclarezca la causa de muerte.

El caso del hombre de 68 años que estaba siendo velado en La Plata tras una presunta muerte natural y cuyos familiares descubrieron que tenía marcas de asfixia en su cuello, fue recaratulado este martes como «homicidio»

Ahora, los investigadores intentan determinar si el neuropsiquiátrico en el que estaba internado contaba con cámaras de seguridad y si existieron responsabilidades del médico que firmó el acta de defunción.

Fuentes judiciales aseguraron a Télam que, tras recibir los resultados preliminares de la autopsia, la fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción de La Plata, Betina Lacki, recaratuló la causa de “averiguación de causales de muerte» a «homicidio”, tras lo cual solicitó distintas medidas de prueba y peritajes.

El episodio ocurrió el pasado viernes en La Plata, cuando Héctor González murió en la clínica neuropsiquiátrica Santa Teresa de Ávila, situada en la calle 61, entre 1 y 2, de la capital bonaerense, donde estaba internado.

Los responsables del establecimiento fueron quienes dieron aviso a la familia sobre el fallecimiento y explicaron que «lo habían encontrado muerto en un baño», relató este martes su hermana.