Parece que la felicidad no puede ser completa para Aldosivi. En el cierre de la sexta fecha de la Liga Profesional, el equipo marplatense consiguió un triunfo que se le venía negando en sus últimas once presentaciones oficiales. En el inicio del ciclo de Leandro Somoza el conjunto portuense venció 2 a 1 como local a Rosario Central, justo el último rival al que había podido ganarle en la pasada Copa de la Liga. Sumó puntos vitales en una jornada en la que prácticamente todos sus rivales directos en la lucha por la permanencia también habían ganado. No sumar de a tres hubiese significado quedar hundido en zona de descenso. Hasta aquí las noticias eran buenas para los hinchas del “Tiburón”.
Sin embargo, mientras que jugadores y hinchas festejaban el esperado triunfo, los dirigentes buscaban encontrar una solución para que la sangre no llegue al río en el caso de Martín Cauteruccio, el goleador histórico del club en primera división (hizo 20 tantos en menos de un año) que en la previa al partido manifestó que no estaba motivado para jugar y que pretende que lo dejen partir pese a tener contrato hasta diciembre de 2023.
Sucede que al uruguayo lo tentaron varios clubes a partir de su magnífica temporada en Aldosivi. Pero al club portuense sólo entró una oferta formal, de San Lorenzo, hace varias semanas atrás. Y la misma fue rechazada por ser considerada “casi un chiste”.
Este martes habría una reunión con el representante del delantero de 35 años para ver si se encuentra una salida. En principio sólo hay dos posibles. O una mejora de contrato para el jugador o que llegue una oferta más cercana a la realidad de San Lorenzo (u otro club).
Por lo pronto, la actitud de no estar en la convocatoria por decisión propia generó profundo malestar en el club y en los hinchas. Una picardía en una relación que en menos de un año venía siendo idílica a partir de las grandes producciones de Cauteruccio.