Sebastián Battaglia fue despedido en la noche de este miércoles por Boca Juniors, que oficializó la salida a través de su cuenta de Twitter, luego de la eliminación sufrida el martes de la Copa Libertadores a manos de Corinthians y unas declaraciones posteriores consideradas desafortunadas a la prensa.

“Boca Juniors comunica que Sebastián Battaglia deja de ser su entrenador y le agradece por los servicios prestados a lo largo de este ciclo”, fue el contenido del texto con el que el club de la Ribera anunció la salida del director técnico.

Battaglia había asumido el cargo el 16 de agosto del año pasado reemplazando a Miguel Ángel Russo y en menos de un año Boca ganó la Copa Argentina y la Copa de la Liga Profesional.

El contrato de Battaglia terminaba a fin del corriente año e interinamente será reemplazado por Hugo Ibarra, director técnico de la reserva.

El ex jugador y máximo ganador de la historia del xeneize estuvo a cargo del primer equipo durante 64 partidos, en los que cosechó 32 victorias, 19 empates y tuvo apenas 13 derrotas.

El ciclo de Battaglia siempre estuvo bajo el ojo de la tormenta y contó con varios idas y vueltas entre los dirigentes y su figura.

De igual manera, desde la entidad de La Ribera le desearon lo mejor de cara a su futuro: “Sebastián, Boca siempre será tu casa. Muchos éxitos en tu carrera”.

La relación entre Battaglia y el vicepresidente Juan Román Riquelme se había tensado aún más en las últimas horas, al reclamar minutos después de la eliminación ante Corinthians por la falta de refuerzos y le pidió disculpas a los jugadores por haber dicho que él trata “de hacer lo mejor con el plantel que tiene”.

Boca sufrió las bajas de Cristian Pavón y Eduardo Salvio, que emigraron en condición de libres a Atlético Mineiro, de Brasil y Tigres, de México, respectivamente, y no contrató por ahora a ningún jugador en un mercado de pases complicado por la situación económica del país y el calendario acotado por el Mundial de Qatar.

En el mundo Boca se sabe que aunque se niegue de ambos lados, la relación entre el jugador con más títulos en la historia de Boca y el ídolo más emblemático de los últimos 40 años del club no pasaba su mejor momento.

“He tenido la posibilidad de pedir jugadores para lugares de la cancha que teníamos que mejorar en cuanto a recambio, pero no fue así y uno trata de hacer lo mejor con el plantel que tiene. Hay situaciones que uno plantea y deberían resolverse en el tiempo adecuado. Y no solo eso, sino que se fueron jugadores que eran importantes, pero son situaciones que no manejo yo”, dijo el director técnico en conferencia de prensa tras la derrota por penales en La Bombonera.