En un nuevo capítulo de la guerra comercial y tecnológica, la Comisión Europea dejará de utilizar los servicios de telefonía móvil vinculados a los gigantes tecnológicos chinos Huawei y ZTE.
Bajo la presión de Washington, Bruselas argumenta motivos de seguridad, después de haber acusado a estas empresas de facilitar las actividades de espionaje de China. La Comisión pide ahora a los Estados miembros que formalicen la prohibición.
Thierry Breton, Comisario de Mercado Interior justifica el obstáculo comercial: “No podemos permitirnos mantener dependencias críticas que puedan convertirse en un arma contra nuestros intereses. Sería una vulnerabilidad demasiado crítica y un riesgo demasiado grave para nuestra seguridad común”.
Estados Unidos, Reino Unido y Canadá ya han tomado medidas similares contra las empresas de telecomunicaciones chinas.
(FUENTE: Euronews)