Guillermo Montenegro volvió a asumir como intendente de Mar del Plata. Durante su discurso en el Concejo Deliberante, habló de ahorro en sueldos políticos y de seguir el camino de facilitar el trabajo. “Estamos en un momento en donde necesitamos trabajar con compromiso, dedicación y convicciones, igual que el primer día, hace ya cuatro años”, indicó.
El jefe comunal asumió oficialmente su segundo mandato al frente de la Municipalidad. Tras jurar como jefe comunal, realizó un discurso breve donde resaltó los logros de su primera gestión.
A continuación, compartimos su discurso:
Quiero felicitar al presidente Javier Milei y al gobernador Axel Kicillof. Espero que podamos trabajar y construir juntos un futuro mejor, todos queremos que le vaya bien a la Argentina, a la provincia de Buenos Aires, a la región Mar del Plata.
Hace cuatro años empezamos a recorrer juntos un camino para poner a Mar del Plata en lo más alto. Para salir del estancamiento en el que estaba, para transformarla, como me escucharon ya decir muchas veces, en la ciudad del sí. Una ciudad en la que los jóvenes elijan quedarse porque saben que tienen oportunidades para crecer, para estudiar, para llevar a cabo sus proyectos y desarrollarse.
Desde el primer momento supimos que el que genera empleo de calidad es el privado y por eso había que sacarle la pata de encima, dejarlos trabajar y crecer. Porque entendemos que si a una empresa le va bien, contrata más gente y eso se traduce en más trabajo para quienes viven en la región.
Por eso también decidimos donar parte de mi sueldo y el de todos los funcionarios. Porque la austeridad y el tener las cuentas en orden también es clave para que podamos seguir mejorando y creciendo juntos como región.
Y esta decisión forma parte de una idea que tenemos muy en claro desde el principio, no es una ola a la que nos subimos. Porque los caminos que uno toma cuando gobierna tienen que estar siempre alineados con sus ideas y convicciones, no pueden ser movimientos a los que nos subimos para ir a favor o en contra de l corriente del momento.
Hay que saber que habrá veces en que las olas pueden ir para un lado o para el otro, pero lo más importante es trabajar sobre un eje en el que uno tenga convicción y mantenerse firme.
Si uno sabe que lo que hace está bien, cuando toca remar contra la corriente hay que hacerlo. Por eso es que a veces toca ir en contra de la ola, a veces toca estar a destiempo, y a veces acompañarla.
Es fácil decir ahora que bajamos cierta cantidad de cargos políticos, lo difícil era donar el 20% del sueldo en 2019. O el 30% en el 2022, como volvimos a hacerlo cuando entendimos que era el camino que teníamos que seguir.
Y lo tenemos muy claro: esto no se logra con confrontación, se logra con diálogo y escuchando. Porque siempre hay que tener en cuenta que una buena idea puede salir de una persona de otro espacio político que no es el nuestro, por eso hay que escuchar, fomentar el diálogo y trabajar juntos.
Va a jurar el equipo que elegí para esta nueva etapa. Ellos saben quién soy y saben a quiénes representan, saben que su rol es cuidar a los que hacen las cosas bien y dar lo mejor para todos los que habitan nuestra región. Por eso les voy a exigir cercanía, honestidad y escucha.
Este trabajo es de tiempo completo y estoy muy orgulloso de poder hacerlo durante cuatro años más. Y esa exigencia que tengo conmigo de estar 24/7 disponible para mi ciudad, es lo que le exijo a mis funcionarios.
Por eso voy a ser implacable con los que no funcionen: Los que no estén a la altura o no cumplan con su función, no formarán parte de mi equipo, se les pedirá la renuncia, y seguiremos trabajando por nuestra región Mar del Plata.
Hay algo muy claro: nuestro trabajo es defender a los marplatenses. En los próximos cuatro años me van a encontrar al igual que el primer día: trabajando en conjunto con Nación y con Provincia, sin partidismos, sin colores políticos.
La seguridad siempre va a ser prioridad. Por eso va a haber una mesa de trabajo multidisciplinaria, y por eso vamos a seguir pidiendo que las fuerzas federales vengan a nuestra ciudad, porque defender a las personas que viven en la región Mar del Plata es un trabajo de todos los días. Porque el único enemigo es el delincuente.
Las ideas de austeridad no son una novedad. Y no solo en cuanto a la cantidad de funcionarios sino también a la decisión de donar parte de nuestros sueldos. Lo hicimos hace cuatro años, lo sostenemos y profundizamos hoy. Para que se den una idea del impacto que tienen estas decisiones: la donación del 20 y el 30% de nuestros sueldos nos permitió que más de 25 millones de pesos mensuales sean destinados a los diferentes servicios que presta el Municipio.
Eso significa más recursos para la ciudad, recursos que por supuesto son de los marplatenses, no de un Intendente o un partido político.
Antes de terminar esta primera gestión, le pedí a todos los funcionarios que renunciaran a las vacaciones que no se habían tomado. Esta decisión representa 150 millones de pesos en el año. En esta misma línea, la reducción de funcionarios políticos va a hacer que tengamos 60 millones más todos los meses para seguir mejorando la calidad de vida de cada uno de los vecinos de nuestra región.
Me eligieron para administrar los recursos que son de todos los vecinos. Y es fundamental hacerlo con coherencia. Por eso siempre nos las ingeniamos para hacer lo mejor con lo que teníamos y nos pusimos creativos para hacer obras que le sirvan a la región. Por eso también trabajamos con los privados para seguir generando empleo y oportunidades para los vecinos.
De eso se trata gobernar: de hacer lo mejor que se pueda con los recursos que tenemos, y estoy convencido de que el camino que tomamos es el correcto, por eso lo vamos a seguir profundizando cuatro años más.