El empresario Gregorio “Goyo” Pérez Companc, uno de los más influyentes del país y dueño de la alimenticia Molinos Río de la Plata y la energética PeCom, falleció este viernes viernes a los 89 años.

Siempre de bajo perfil, durante su vida participó de numerosos negocios y la mayor parte de ellos estaban concentrados en compañías de alimentos, telecomunicaciones y energía.

Según se informó, al momento de su muerte, él y su grupo familiar –Perez Companc Family Group– se posicionaban como los segundos empresarios con el patrimonio más abultado de la Argentina, tan solo por detrás de Marcos Galperín, fundador y CEO de Mercado Libre.

La revista Forbes lo había ubicado en el puesto 782 del ránking de las personas más ricas del planeta, con una fortuna estimada en los US$4.200 millones.

A fines de mayo de este año, tres de sus siete hijo compraron a sus hermanos las principales compañías del Grupo, operación que significó un desembolso de US$550 millones.  De este modo, Luis Pérez Companc y sus hermanas Rosario y Pilar se quedaron con el control de Molinos Río de la Plata, Molinos Agro y la petrolera Pecom.

En 1943, “Goyo” se ihabía introducidoen el mundo de los negocios de la mano de su hermano adoptivo, Carlos Perez Companc, al fundar su primera empresa: la naviera homónima, de la cual se hizo cargo tras el fallecimiento de Carlos.   En su momento, también asumió como titular del Banco Río de la Plata y de SADE S.A.

Luego, el empresario fue diversificando ampliamente sus inversiones productivas y logró consolidarse como uno de los más influyentes del país a través del Grupo PeCom, del sector energético, que en la actualidad está a cargo de tres de los siete hijos del magnate.

  • Pérez Companc había nacido en Buenos Aires el 23 de agosto de 1934 y según el libro “Los dueños de la Argentina”, del periodista Luis Majul, fue el hijo biológico de Benito Bazán y Juana Emiliana López, un matrimonio muy humilde que lo dio en adopción a los 11 años.

Así, en 1946 fue adoptado por la francesa Margarita Companc de Pérez Acuña, que estaba casada con Ramón Pérez Acuña desde 1907, con quien tenía tres hijos.

Su familia adoptiva había fundado la empresa San Benito, en 1919, dedicada a la cría de ovejas para la comercialización de lana.  En 1946, los Perez Companc compraron dos barcazas de la Segunda Guerra Mundial a Estados Unidos y crearon con ellas su propia empresa naviera; diez años después adquirieron el Establecimiento Forestal San Jorge, en Misiones, mientras que en 1958 comenzó a operar la Petrolera Perez Companc.

“Goyo” había estudiado en el Colegio La Salle de Buenos Aires (no había terminado estudios universitarios) y estuvo casado con María del Carmen “Munchi” Sundblad Beccar Varela en 1964, con quien tuvo siete hijos: Catalina, Cecilia, Jorge, Luis, Pablo, Pilar y Rosario.