En un operativo conjunto, agentes de la División de Investigaciones Cibercrimen y de la Sección de Investigaciones Cibercrimen Junín lograron desmantelar una red de estafadores, que operaba desde la Unidad Carcelaria Nº 15 de Batán y desde una vivienda en Quequén, en el partido de Necochea.
La investigación se inició cuando una víctima denunció haber sido engañada mediante una falsa venta de autopartes, realizada por un recluso. Los estafadores solicitaban el pago por productos que nunca eran entregados.
Tras varios meses de pesquisas, los investigadores reunieron suficientes pruebas para solicitar una orden de allanamiento, la cual fue autorizada por el Juzgado de Garantías Nº 1 del Departamento Judicial de Trenque Lauquen.
En la madrugada del 12 de agosto de 2024, se llevaron a cabo los allanamientos simultáneos en la Unidad Carcelaria Nº 15 de Batán y en la vivienda de Quequén.
Durante el operativo en la prisión de General Pueyrredón, se confiscó un teléfono móvil. En el domicilio de Quequén, los agentes encontraron seis celulares, $200.000 en efectivo y documentación relevante para el caso.
La fiscalía imputó el delito de estafa a los investigados y procedió al análisis de los elementos incautados. La colaboración de la Sección de Investigaciones Cibercrimen de Junín fue clave para desarticular esta red de estafas informáticas.
Este operativo ejemplifica cómo la colaboración entre diferentes unidades policiales puede llevar a resultados efectivos en la lucha contra el cibercrimen. (InfoGEI)Ac
