La mujer vinculA? ante la Justicia a miembros del Servicio Penitenciario Federal con la desaparición de la joven. Fue torturada.
Hace unos dA�as, una mujer denunciA? que fue golpeada y torturada por dos personas en su casa de la ciudad de Salta, tras vincular ante la Justicia a su ex esposo, un integrante del Servicio Penitenciario Federal, con la desaparición de MarA�a Cash, que fue vista por A?ltima vez en julio de 2011.
Ahora, en una entrevista al medio salteA�o El Expreso, la testigo asegurA? que la joven desaparecida en julio de 2011 “nunca saliA? de Salta” y “no estarA�a viva”. AdemA?s, vinculA? a a su ex marido en secuestros vinculados a la trata de personas en la región.
“Todo comenzA? cuando me sacaron la tenencia de mis hijos, pese a que yo habA�a denunciado a mi ex marido por violencia de gA�nero. Para evitar los golpes y decir ‘basta’, le dije que iba a hablar de lo que habA�a escuchado en esas reuniones en donde se nombraba a la seA�orita (MarA�a Cash)”, asegurA? la mujer.
“Ellos (su ex pareja y otros dos agentes del Servicio Penitenciario Federal) se organizaban en distintas casas de Campo Quijano para cometer delitos de trata de personas. Ella (MarA�a Cash) no fue la A?nica persona. Hablaban de traslado de bolsas con ropa de mujeres que no se podA�an tocar”, dijo.
“Aparentemente, era la chica con diferente color de cabello y mA?s flaca. Hablaban sobre la muerte seca; no comprendo mucho sobre el tema, quizA?s son cA?digos”, detallA?, y afirmA? que no hizo la denuncia porue “habA�a violencia que se ejercA�a sobre la familia”.
Sobre la desaparición de MarA�a Cash, explicA? que “no saliA? nunca de Salta pero no estarA�a viva”. AdemA?s, dio detalles sobre cA?mo fue trasladada. “Hay un auto que era mA�o y desapareciA?. En ese vehA�culo fue transportada MarA�a con uno de mis hijos”, relatA?.
Sobre la banda de trata de peronas, expresA?: “Siempre cambian la manera de actuar y la tA?ctica. En ese tiempo en el que vivA�amos en Campo Quijano habA�a que formar una escena familiar; si yo no podA�a estar, mis hijos tenA�an que hacer creer que la persona que llevaban era una mamA?”.
Hace unos dA�as, la mujer denunciA? que fue golpeada con palos y tajeada con un arma blanca con la inscripción “el macho siempre gana”, frase que según el relato de ella, los atacantes le repitieron de manera insistente.
Su abogado, Sergio Chiericotti, sostuvo: a�?Mi clienta, insiste que una de esas chicas era MarA�a Cash. Es mA?s, su hijo mayor, hoy de 17 aA�os, tiene en su memoria la misma información pues A�l, en ese entonces de 10 aA�os, era el encargado de llevarle agua a las muchachas”. Y aA�adiA?: “Esa historia tiene otro final escandaloso”.
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