Esta semana, el juez Edson Fachin del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil deberA? resolver si eleva al pleno una moción que presentA? la defensa del expresidente de ese país, Luiz InA?cio Lula da Silva, para que su cliente sea puesto en libertad.
La resolución que cuestionan esos abogados establece que se puede encarcelar a personas acusadas una vez que su condena es ratificada en segunda instancia a pesar de no haber agotado todas las etapas de apelación, circunstancia que permitiA? el arresto del antiguo mandatario el pasado 7 de abril.
Sin embargo, los letrados del dirigente del Partido de los Trabajadores (PT) sostienen que el STF estipula que “puede” haber arresto, no que “debe” haberlo. Eso depende de que haya argumentos suficientes y, por tanto, del criterio de cada magistrado.
“El Supremo no autoriza la prisión sin fundamento, por eso la prisión de Lula es ilegal”, declarA? dA�as atrA?s el abogado Evandro Pertence al diario Folha de Sao Paulo.
En principio, esa petición fue dirigida a Marco AurA�lio Mello, magistrado del STF que votA? a favor del ‘habeas corpus’ preventivo a Lula y quien normalmente se encarga de las acciones genA�ricas sobre encarcelamientos tras condenas en segunda instancia. Sin embargo, el caso terminA? en manos de Fachin por sorteo.
Acusación sin pruebas
En enero, Lula da Silva fue condenado a 12 aA�os de prisión en el marco de la megacausa conocida como Lava Jato (lavado a presión, en espaA�ol), que revelA? una trama de corrupción alrededor de la empresa estatal PetrobrA?s y los sobornos que pagA? la constructura Odebrecht.
En concreto, al exmandatario lo acusan de aceptar un lujoso departamento trA�plex frente a la playa ubicado en el condominio Solaris de GuarujA? (Estado de San Pablo) a cambio de beneficiar a la constructora OAS en sus contratos con la estatal petrolera.
Sin embargo, durante el juicio no se logrA? demostrar que sea el propietario del inmueble y tampoco se identificA? cuA?l serA�a el acto o la omisión (delito de “corrupción pasiva”) que habrA�a dado origen a que recibiera esa residencia.
Ocupación como protesta
Para poner de manifiesto que consideran la situación injusta, este lunes diversos integrantes de movimientos populares ocuparon esa vivienda. “La denuncia por la cual fue condenado Lula es una farsa judicial”, asegura Guillherme Boulos, lA�der del Movimiento de Trabajadores Sin Techo (MTST) y precandidato presidencial por el Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
Al respecto, ese aspirante estima que “si el departamento es de Lula, puede ser ocupado por el pueblo” y “si la gente no puede estar ahA�, que expliquen por qué estA? preso”.
RT
