Una madre envió a su hija al Jardín de Infantes con un grabador en el cochecito porque notaba cambios en su conducta y así se enteró de los maltratos que recibía en la institución.
Una madre envió a su hija al Jardín de Infantes Jesús Niño de la localidad de Avellaneda con un grabador escondido en el cochecito porque notó cambios de conducta de la menor y quería cerciorarse de que el problema no estaba allí. Sin embargo, se encontró con lo peor: un audio de casi cinco horas donde sobraban los gritos, los llantos de los chicos y las violentas amenazas de sus maestras. Por el hecho, tres docentes fueron separadas preventivamente de sus cargos.
“Te voy a romper los huesos” o “Dormite porque se te pudre”, fueron algunas de las frases que escucharon los padres. “El audio es fatal. Una vergüenza y una tristeza para todos”, indicó una mamá en declaraciones al canal C5N.
Asimismo, la mujer indicó que a los nenes los dormían con la música aturdiéndolos, que a todos les ponían apodos despectivos y que llegaban a provocarles el vómito con la cuchara cuando les daban el almuerzo y después, los obligaban a comérselo.
Las autoridades del establecimiento aún no le dieron ninguna explicación a los padres después de que realizaran la denuncia, solo dejaron un cartel colgado en la puerta que anuncia que el lugar permanecerá cerrado hasta el viernes 4 de mayo.
Antecedente en Santa Fe. Hace dos semanas, un hecho similar ocurrió en la localidad santafecina de Sunchales. Allí, una pareja denunció un caso de maltrato infantil que padeció su hijo, de un año y ocho meses, en el Jardín de Infantes Creciendo Kids.
Los padres relataron que al observar algunas actitudes del menor, decidieron ocultar un celular en su mochila para grabar lo que ocurría en la institución y allí comprobaron una serie de maltratos por parte de las maestras del lugar. En una grabación, de alrededor de tres horas, se puede escuchar a las dos maestras del Jardín dirigiéndose a los pequeños, con una entonación que podría configurarse como maltrato infantil.
Gonzalo Franza, padre del menor en cuestión, escribió una carta para expresar su dolor ante el hecho: “Mi bebe tiene un añito y ocho meses. Él habla pero poquitas palabras. Hace tiempo que lo notábamos raro con la madre, a la hora de bañarse no quería entrar al baño, gritaba, lloraba, cuando le decíamos que ‘no’ a algo se pegaba solo en la cabecita, pensábamos que nosotros estábamos fallando en algo”, así arranca el texto.
“La realidad es que al jardín donde lo mandábamos desde sus primeros 3 meses, nos enteramos anoche que era maltratado psicológicamente todo el tiempo. Escuchar una grabación de tres horas donde su seño (no voy a dar nombre) le dice a mi bebe cortala o vas a pasar la mañana en el baño, pasan los minutos y otro bebé pregunta por él y la maestra responde ‘ahora está pensando no puede (encerrado en el baño), pasa una hora de grabación y la seño dice quien te dio permiso de salir del baño, volve total lloras igual que en la salita’, completó en su relato.