En una conversación privada con la redacción de “Multimedios” A” Natalia Aumiral de 30 años de edad, madre de tres menores de 4, 5y 9 años, nos relata que en Noviembre del pasado año, perdió todas sus pertenencias, tanto las inmuebles como así también la documentación de toda su familia, quedando su hogar en condiciones inhabitables tras un voraz incendio accidental.
A raíz de lo sucedido Natalia, recibió del municipio una casa en condiciones algo precarias con la promesa de que a la brevedad esta seria acondicionada para que pueda ser habitable ya que uno de los faltantes en esta vivienda serian, la puerta de entrada y del baño y en parte del techo algunas chapas. Lo cierto es que hasta el momento el municipio no ha cumplido con lo prometido.
Dadas las condiciones climáticas actuales esta familia sufre las necesidades provocadas por el frio y la humedad, peligrando los menores ante la posibilidad de enfermedades.
Natalia es oriunda de Gral. Piran, pero desde hace diez años que vive en Cnel. Vidal, está sola con sus hijos. La única entrada de dinero con la que cuenta es la asistencia que cobra por sus hijos, y además cuenta con una beca de $ 3000 que recibe a cambio de brindar tareas laborales de limpieza en las oficinas de Defensa del Consumidor tres veces a la semana.
Ella agradece al municipio de que en su momento le brindaran un hogar, pero también sostiene que después de tantos meses de lo sucedido la vivienda se encuentra en las mismas condiciones de inhabitabilidad. En varias oportunidades ella realizo el reclamo pero no recibió respuesta alguna hasta el momento.
Su realidad económica la lleva a vivir situaciones límites como por ejemplo…”MIS HIJOS PIDEN UNA TAZA DE LECHE Y DEBO CONFORMARLOS SI ES QUE PUEDO APENAS CON UN TÉ Y ACOSTARLOS TEMPRANO PARA QUE NO SUFRAN TANTO FRIO” (Dice Natalia).
Después de seis meses las respuestas del municipio han sido llenar y llenar papeles que en definitiva no han resuelto la problemática.
