Después de seis días de paro, la recolección de residuos se reanudará esta tarde. Así lo anunció el Sindicato de Camioneros luego de que sus trabajadores cobraran el sueldo y el aguinaldo.
La empresa depositó los haberes del personal luego de que la municipalidad abonara la partida correspondiente a mayo.
La jornada había comenzado con una audiencia infructuosa en la sede local del Ministerio de Trabajo de la provincia, de la que participó el secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano. “Fue un abogado de la municipalidad y uno de la empresa. No dieron ninguna respuesta”, se quejó el gremio.
Moyano se fue fastidioso del encuentro. Y a partir de ese malestar fue convocada una movilización frente al palacio municipal. Allí concentraron trabajadores de la empresa 9 de Julio, que atravesaron los camiones en las calles e impidieron el tránsito en avenida Luro desde Independencia a Mitre y en Hipólito Yrigoyen entre San Martín y Luro.
Con cánticos contra el intendente, los camioneros reclamaron el pago del sueldo y el aguinaldo. “Hasta que no aparezca la plata sigue el paro”, dijo desde un micrófono el secretario gremial y de interior del gremio, Gabriel Aparicio, a los trabajadores que manifestaban frente a la comuna.
El municipio ratificó desde temprano que estaría el pago. El secretario de Economía y Hacienda, Hernán Mourelle, cuestionó además la capacidad financiera de la empresa concesionaria, Transportes 9 de Julio, y deslizó que Camioneros controla una parte de la compañía. Aparicio lo descartó de plano y recordó que, en todo caso, el municipio podía “echar” a la empresa”.
El municipio señaló en un comunicado que comenzó el pago a la concesionaria “con fondos propios” dentro “de los plazos correspondientes”, y señaló que le “resultó llamativo” que la firma no abonara los sueldos y aguinaldos. En esa línea, recordó que se encomendó al Ente Municipal de Servicios Urbanos (Emsur) la realización de una auditoría para determinar la capacidad técnico-financiera de la 9 de Julio.
El paro de los camioneros comenzó el jueves a la noche porque la empresa no había depositados sueldos y aguinaldos. El viernes, el municipio responsabilizó a la Provincia por el retraso de una partida de la Nación destinada a la empresa. Ese mismo día, el Ministerio de Trabajo dictaminó la conciliación obligatoria, pero el sindicato no la acató. “No creo que un trabajador vaya con el papelito de la conciliación obligatoria a pagar la luz, el gas, al supermercado o el colegio de los chicos”, dijo Pablo Moyano al portal lacapitalmdp el sábado a la tarde, cuando ya era irremediable la continuidad del paro durante todo el fin de semana largo.
Con miles de turistas de visita en la ciudad, el domingo las calles siguieron llenándose de bolsas de residuos. En algunas esquinas se formaron verdaderas montañas de basura.
El lunes fue el día de los cruces fuertes entre el gremio y el intendente. Carlos Arroyo trató de “inadaptados” a un grupo de camioneros que impidieron la salida de un servicio de emergencia prestado por personal municipal. Moyano le devolvió en el mismo tono: dijo que Arroyo “es un inepto que tiene desprecio por los trabajadores”.