Estamos en la Argentina de la inflación galopante y con la mitad de los niños bajo la pobreza.
Pero también estamos en la Argentina de la lucha y unidad de los trabajadores y trabajadoras. Los desafíos del espacio 21F.
Inflación
Se conoció que el índice de inflación de junio fue de 3,7% (INDEC) y marcó uno de los niveles mensuales más altos desde que Macri es presidente de la Nación.
El acumulado en el semestre llegó a 16% y transformó en una comedia trágica el techo del 15% en las paritarias que puso el gobierno. Todos los cálculos estiman que en 2018 la inflación superará el 30%.
Si hacemos un recorte más amplio, vemos que la inflación acumulada desde que Mauricio Macri está en la Casa Rosada trepó al 85% (3,8% de diciembre 2015 + 40,3% año 2016 -índice Congreso- + 24,8% año 2017 -INDEC- + 16% primer trimestre de 2018 -INDEC-).
En 2016 los salarios perdieron más de 10% de poder adquisitivo frente a la inflación. En 2017, el promedio de los aumentos en paritarias tan sólo igualaron a la inflación y nunca recuperaron lo perdido el año anterior. Todo indica que en 2018 la pérdida de poder adquisitivo será muy grande también.
Ni hablar de los sectores tercerizados, precarizados o sin posibilidad de discutir aumentos salariales, que son un gran número que permanece oculto de las estadísticas oficiales pero que son uno de los sectores más perjudicados.
Hay un 35% de trabajadores que se encuentran en situación irregular, no tienen seguridad social, “están en negro” o, mejor dicho, precarizados, subcontratados o tercerizados. También son jubilados/as que cobran la mínima, los/las que reciben planes sociales, trabajadores desocupados/as, los que hacen changas o se las arreglan como pueden. Son los mayores perjudicados en esta historia de inflación en épocas de Macri, que no es otra que inflación y ajuste en épocas de FMI.
No hay ninguna duda de los objetivos que tiene el FMI sobre la Argentina y el continente (como por ejemplo Haití). No hay un FMI renovado, no existe el “nuevo FMI” del que hablan Macri y Dujovne. Es el mismo que ya conocemos.
Como afirma el economista de la CTA Autónoma Julio Gambina en un informe del Instituto de Estudios y Formación (IEF – CTA-A): “Para el FMI lo que importa es el rumbo de la política económica, favorable a la rentabilidad de las empresas y a las necesidades de los inversores internacionales”.
Pobreza
El INDEC también acaba de difundir que los alimentos aumentaron en junio 5,2% y hundieron a más familias bajo la línea de la pobreza.
Hace dos semanas se conoció que la mitad de los niños/as de la Argentina son pobres (48,1%). Así de crudo y duro como se lee: la mitad de los chicos en este país son pobres, según el último informe de Barómetro de Deuda Social de la Infancia de la UCA, difundido a fines de junio. Este informe además determinó un déficit alimentario de 17,6% (chicos/as que no comieron correctamente) y 8,5% en de chicos/as que directamente pasaron hambre en la Argentina.
También aumentaron los chicos/as que asisten a los comedores escolares para alimentarse. Se pasó del 25% en 2015 y 2016 a 32% en 2017 (datos UCA).
Hay que tener en cuenta que esta terrible cifra podría aumentar drásticamente provocada por el contexto actual de mayor inflación, devaluación del peso y disparada de dólar, tarifazos, el aumento de productos de la canasta básica como el pan y la leche y la caída del salario real de los últimos meses de 2018.
Y podemos también ir más allá y poner en contexto que estos números pueden incrementarse si pensamos que el ajuste económico pautado con el FMI acaba de comenzar y que, según gran parte de los analistas, se va a sentir a partir de ahora.
Lucha
Esta situación social va en paralelo a un primer semestre de 2018 de grandes movilizaciones, donde el movimiento obrero y los movimientos sociales son los grandes protagonistas. Sólo por enumerar algunas: la marcha del 21 de febrero, la del 25 de mayo y la reciente del 9 de julio.
Además, hay que remarcar el paro nacional del 25 de junio.
También hay despidos en el sector público y privado.
Según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), en los primeros seis meses de 2018 hubieron 26.000 despidos entre el sector público y privado.
Los 354 periodistas despedidos de la agencia estatal Telam es un ejemplo claro de el ajuste y una lucha emblemática de este año.
Es decir, ante la caída del consumo de los sectores populares y la pérdida de poder adquisitivo del salario provocada por el aumento de los precios de los alimentos, los tarifazos, el transporte, combustibles, medicamentos y alquileres, entre otros ítems, los trabajadores/as y los movimientos sociales hemos salidos a la calle, nos manifestamos en rechazo a esta política económica de Macri y el FMI.
Unidad: 21 de Febrero
Desde la enorme movilización del 21 de febrero de este año se conformó el espacio 21F, una multisectorial que agrupa a sectores de la CTA Autónoma, CTA de los Trabajadores, de la CGT como Camioneros, la Corriente Federal, movimientos sociales, organizaciones políticas, barriales, territoriales, centros culturales, entre otras múltiples identidades.
Este espacio va creciendo en todo el país y se va conformando multisectoriales del 21F en Buenos Aires, Mar del Plata, Mendoza, Jujuy, Bahía Blanca, Neuquén, Santa Fe, etcétera, etcétera, etcétera.
El espacio 21F es la unidad de acción más desarrollada que estamos construyendo. Se trata de la unidad de acción en un espacio masivo, diverso y plural en todo el país que da pelea contra el ajuste en un marco donde somos conscientes de las diferencias, pero que no son motivo alguno para no luchar y organizarnos juntos.
El 21F es un espacio donde quedan a un lado las mezquindades y egoísmos que tantas veces decimos que tenemos que superar.
El 21F es novedoso por su amplitud, diversidad y federalismo y ahí radica su principal fortaleza. Es novedoso y es una apuesta fuerte para pelear contra el ajuste económico y el FMI. Es imposible dar esta enorme pelea sin esta unidad de acción.
Por José Rigane
Secretario Adjunto de la CTA Autónoma
Sec. General de la FeTERA y del Sindicato Luz y Fuerza Mar del Plata