El 84% de los asociados al Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) dijo que a su compañía le fue “moderadamente peor o mucho peor” de lo que esperaban en el primer semestre del año.
No obstante, el 56% mostró “optimismo moderado” sobre la recuperación de la economía, en medio de reclamos al Gobierno para que “controle el gasto público y la inflación”, según los datos que surgen del tradicional sondeo realizado por la consultora de opinión pública D’Alessio Irol.
Para los 232 ejecutivos socios de IDEA que respondieron en el sondeo, el déficit fiscal es el “principal problema” de la Argentina y el origen de las dificultades económicas actuales, en línea con lo que sostiene el Gobierno.
El director de la consultora, Eduardo D’Alessio, explicó los resultados de la encuesta y destacó que los empresarios quieren que esa diferencia sea resuelta “a través del Estado, con la optimización del gasto público”, para que no “aumenten los impuestos”.
Además, entre las recomendaciones del sector empresarial al Gobierno, figuran la búsqueda de “consensos en temas cruciales” y la urgencia de “controlar la inflación”.
El sondeo, que se realiza de forma ininterrumpida desde hace 24 años, arrojó que las principales razones del empeoramiento de la situación empresarial fueron la “devaluación de la moneda, la caída del nivel de actividad, la baja del consumo, la falta de inversión, las elevadas tasas de interés y los cortes en la cadena de pagos”.
En tanto, el escaso 7% que dijo que su situación mejoró, -el restante 9% dijo que fue “igual”- basó su respuesta en la valoración del “acuerdo con el FMI, el aumento del dólar, la mejora en términos de intercambio”, y la promesa de “déficit cero” que hizo el gobierno nacional al “comprender que no se podía retrasar más el ajuste”.
Al ser consultados sobre las expectativas en cuanto a exportaciones dentro de los próximos doce meses, tras la intensa devaluación, el 51% de los ejecutivos indicó que crecerá la actividad, en tanto que el 41% cree que quedará igual y el resto que disminuirá. Además, 4 de cada 10 empresarios considera que las ventas subirán en el próximo año, y se observó mayor optimismo entre las compañías de servicios que en las industriales.
Sin embargo, al responder sobre las perspectivas de rentabilidad en los 12 meses siguientes, el 50% de los ejecutivos sostuvo que se reducirá, contra el 22% que espera subas y el 28% que dice que seguirá en los mismos niveles.
En cuanto a inversión de las compañías, solo el 18% estima que habrá incrementos, mientras que el 43% dice que continuará igual y el 39% que bajará.
La encuesta abordó también los factores que influyen a la hora de aumentar la competitividad del país, y en ese punto enumeraron como puntos principales: “Baja de la inflación, reforma impositiva, reforma laboral y buen funcionamiento de las instituciones y la Justicia”.