El juez que envió a el ex presidente Lula da Silva a la cárcel, confirmó que formará parte del próximo Gobierno. Dijo que establecerá una agenda de lucha anticorrupción.
El juez Sérgio Moro, quien condenó y envió a la cárcel al ex presidente Luiz Lula da Silva y llevó adelante la operación anticorrupción conocida como Lava Jato, aceptó este jueves el ofrecimiento que le hizo el mandatario electo Jair Bolsonaro para que sea ministro de Justicia a partir del próximo 1 de enero.
En un comunicado, Moro aseguró que aceptó “honrado” la invitación ante la perspectiva de poder implementar una “fuerte agenda anticorrupción y contra el crimen organizado”, según adelantó la cadena Globonews.
El juez también manifestó “cierto pesar” por tener que abandonar 22 años de carrera, ya que el aceptar el cargo no podrá volver a ejercer de juez de primera instancia.
“En la práctica, significa consolidar los avances contra el crimen y la corrupción de los últimos años y alejar riesgos de retrocesos por un bien mayor”, agregó.
En sus primeras entrevistas tras ser elegido presidente el domingo, el ultraderechista Bolsonaro dijo el lunes que le gustaría tener a Moro como ministro. La lucha contra la corrupción fue uno de los principales argumentos durante la campaña del ahora presidente electo.
El magistrado trabaja en la 13 Corte Penal Federal de la ciudad de Curitiba (sur), donde se concentran las investigaciones en primera instancia del caso de corrupción en Petrobras, que destapó los millonarios desvíos que operaron durante una década en la estatal.
El escándalo en la petrolera estatal llevó a prisión a importantes empresarios y políticos, entre ellos a Lula, a quien Moro condenó por corrupción y posteriormente decretó su ingreso en prisión cuando la pena fue ratificada y ampliada hasta los doce años de cárcel en segunda instancia.
La reacción de Lula
“Jamas entraría a la política”, dice el título del diario O Estado de San Pablo, al presentar una entrevista exclusiva con Moro, de 2016. Aquella nota fue subida a Twitter este jueves por el propio diario, recordando que por entonces el juez explicaba: “soy un hombre de justicia y sin desmerecer a nadie, no soy un hombre de la política”.
Lula compartió ese tuit rápidamente al enterarse que Moro había finalmente aceptado la invitación de Bolsonaro de ser Ministro de Justicia.
El encarcelamiento de Lula significó que el candidato favorito para ganar las presidenciales en Brasil quedara fuera de carrera. Fernando Haddad, el reemplazo de último momento de Lula, nunca pudo recoger la intención de voto de su mentor. Y fracasó estrepitosamente en los comicios del domingo.