Los trabajadores de la firma permanecen hasta más de siete días en Vieytes al 2800, en la vereda de su antiguo empleador, Carlos Blanco. La denuncia radica en que “los dejó en la calle, sin aviso y sin ningún tipo de reparación”. Quieren que “se los vuelva a incorporar”, a pesar de las malas condiciones edilicias de la cooperativa, “porque necesitan el laburo”. Este martes asistieron a una audiencia en el Ministerio de Trabajo, pero el Sr. Blanco no se hizo presente.
Alejandro, vocero de sus compañeros y uno de los damnificados, habló con Bien Despiertos, programa emitido de 7 a 9, por Radio de la Azotea, y dijo que “nosotros pertenecíamos a una empresa llamada Comercial Atlántico Fish, que tercierizaba pescado para la Cooperativa Rocamare, entre otras. Hace un año que estábamos trabajando y de golpe, empezó a bajar la producción y decidió bajar las persianas de un día para el otro, sin mandarnos un telegrama. Estas personas crean empresas fantasmas por uno o dos años, hasta que ocurre esto. La cooperativa dependía de nosotros porque somos los que trabajábamos. Pero ahora, les llenamos los bolsillos y nosotros quedamos en la calle”.
Agregó que el fundamento de su ex empleador, Carlos Blanco, fue que “ante la situación económica del país, no podía seguir”, pero se enteraron que “sigue facturando con la empresa Atlántico Fish y le factura a otros que no pueden exportar, entonces exportan a nombre de la empresa de él”.
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María Laura Lago- Redacción MdpYa.
