Se realizó en el Sindicato de Luz y Fuerza de Mar del Plata el Acto Público Homenaje al Secretario General y máximo referente del gremio fallecido esta semana y a los 25 años de la Carpa de la Solidaridad que luchó durante más de siete meses por las reincorporaciones de los cesanteados en la empresa provincial de energía, ESEBA, en 1994-1995.

El Salón de Asambleas del Sindicato estuvo colmado de compañeros y compañeras lucifuercistas, trabajadores, jubilados y representantes de Organizaciones Sociales, Sindicales, dirigentes gremiales, políticos, locales y nacionales que vinieron especialmente a la ciudad para honrar la memoria de José Rigane.

En el comienzo del Acto, la Comisión Directiva del gremio, con la intervención del Secretario Adjunto, Sebastián Farías, realizaron un sentido homenaje para recordar al referente y convocaron a continuar el legado y el camino marcado por José.

Además se leyeron algunas de los cientos de saludos y mensajes recibidos de Mar del Plata, Argentina y de todo el mundo, por la noticia de la desaparición física de Rigane.

Luego se proyectó un cortometraje que repasó lo que fue la lucha contra los despidos y la privatización de la entonces empresa provincial ESEBA. A raíz del despido de 23 trabajadores en 1994 y las amenazas de las privatizaciones de las empresas públicas de servicios, el Sindicato instaló durante más de 7 meses una Carpa frente a las oficinas de ESEBA en Diagonal Pueyrredon y Belgrano. Lo que se conoció como la “Carpa de la Solidaridad” fue un hito histórico en la lucha de las organizaciones sindicales y del movimiento obrero en todo el país. El 24 de febrero de 1995, luego de firmar la reincorporación de los 23 despedidos, se levantó la protesta, lo que significó una victoria histórica, de las más importantes en la historia del Sindicato.

Rigane dijo en aquel momento frente a los trabajadores, sus familiares y la comunidad reunida: “El valor de la Carpa va mucho más allá de la lona, de ese espacio, de la estética y su figura. Nos permite ahora comenzar otra etapa, la del diálogo, la de buscar el acuerdo, aunque sin malvender ni entregar lo que conseguimos en la lucha. La carpa nos permitió comprender que era posible la lucha, objetar las intenciones de la empresa, generar iniciativas, encontrarse con las propuestas de la comunidad para mejorar las nuestras y seguir adelante con la lucha y se fue convirtiendo, con los días, con los meses, en el símbolo también, de la unidad de los trabajadores de Luz y Fuerza”.

En todo momento la comunidad acompañó, se comprometió, fue solidaria, les dieron el valor y el empuje necesarios para sostenerse en el tiempo. Se juntaron 72 mil firmas por esta causa (cantidad superior al número de votos necesario para elegir un intendente en ese momento) que se llevaron a la gobernación bonaerense; y otras 7 mil que fueron presentadas en el Concejo Deliberante.

ANÁLISIS HISTÓRICO

Luego, los Historiadores e Investigadores del CONICET, Pablo Ghigliani y Gustavo Contreras, realizaron un análisis científico de lo que significó, no sólo para este gremio sino para la lucha nacional de la clase obrera, esa Carpa y todo lo que sucedió alrededor.

Ghigliani afirmó que “la carpa demostró que, unidos, con convicción y organizados, se podía vencer. José afirmaba que si no se continuaba la lucha, esa carpa no tendría ningún sentido. Él miraba el futuro y hoy vemos que hay nuevas generaciones que siguen luchando, como se hizo siempre en este Sindicato”.

VIDEO HOMENAJE

El momento más emotivo del Acto sucedió cuando se proyectó un video con imágenes y audios de algunos de los más importantes momentos en los más de 30 años de José en el gremio, con la coherencia y el compromiso de siempre.

En el cierre, Sebastián Farías volvió a levantar las banderas de la lucha y la unidad. “No sólo tenemos que decir, sino también tenemos que hacer, porque somos acciones. Hay mucho por qué luchar, sigamos unidos, como nos enseñó José, para seguir en la calle. Ese es el mejor homenaje que podemos hacerle”.