El portavoz presidencial pasará de ser Secretario de Estado a ministro.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, fue ascendido por Javier Milei. En las próximas horas se oficializará que dejará de ser Secretario de Estado y pasará a tener rango de ministro. Eso significa más dinero, más poder y además ya se habla de la posibilidad de que sea candidato en 2025 para el Congreso.
Adorni ahora dependerá directamente del Presidente. Y tendrá el mismo rol que hoy ocupan la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; el secretario de Legal y Técnica, Javier Herrera Bravo; el secretario de Prensa, Eduardo Serenellini, y el titular de la SIDE, Sergio Neiffert. Todos ellos secretarios con rango de ministros.
El vocero pasará a cobrar más de un millón de pesos más. De sus 2,8 netos actuales se estirará a casi 4 millones de pesos de su salario, sin contar con la unidades retributivas que se otorgará. Con eso, puede llegar a redondear un jugoso salario de más de 5 millones de pesos.
Este dato se suma que Manuel Adorni se armó una pyme en la Casa Rosada. Desde que asumió designó a más de 100 personas. El vocero presidencial tiene siete direcciones nacionales, 14 direcciones simples y 16 coordinaciones. Septuplica, por citar un ejemplo, a la Subsecretaría de Lucha contra el Narcotráfico. La pequeña y mediana empresa estatal de Adorni está compuesta por la Subsecretaría de Vocería y Comunicación de Gobierno.
Por mes, la pyme de Adorni puede llegar a gastar 300 millones de pesos. Por año, el vocero le consume 3600 millones de pesos al Estado. Esta cifra surge porque contrató 101 personas, que van de los cargos más altos, como directores o coordinadores, a 29 asesores. Demanda recursos mensuales estimados en 132.500.000 pesos, pero sin contemplar horas extras o unidades retributivas adicionales, lo que duplica ese gasto.