Una vecina de la zona denunció el crítico estado que atraviesa el lugar. “Las calles son un desastre, las luminarias están en muy mal estado y la seguridad es deplorable. Parece un chiquero la zona, estamos peor que una villa de emergencia”, aseguró.
MdpYa continua con el relevamiento de barrios está vez en General Pueyrredón. Gladys, una vecina de la comunidad, detalló que el lugar padece de falta de planificación y hay una ausencia muy grande del Municipio, esta situación produce que cada día se agrave el estado general de la zona.
A través de un video la vecina denunció el estado en el que viven las y los vecinxs del barrio General Pueyrredón. La inundación de una calle produce serios inconvenientes para la circulación a pie y con vehículos, ya que llueva o no, la calle permanece totalmente inundada.
“El jardín es el 941, está ubicado en Gutenberg, entre la ex 53 esquina Brumana. Llueva o no es terrible, el video lo hice en un día caluroso. Si bien está asfaltada la 47, Génova y la 51, la 49 no y la 53 es tierra de nadie, te vas en moto o en auto y rompes los vehículos, camiones directamente no entran porque no pueden ingresar y se quedan encajados”, denunció Gladys a MdpYa.
El agua que se visualiza en el video abarca las calles Gutenberg, Polonia y hasta casi Ratery. “En Polonia y Calabria hay otro igual, y en la parada de colectivo de Génova y Magnasco la situación se repite, por ambos lados hay agua”, afirmó.
En la zona hay algunos caños rotos, la calle se encuentra en muy mal estado, hay pozos grandes que van incrementando su tamaño cada vez que llueve y ante la falta de mantenimiento por parte del Estado Municipal, “la situación es cada vez peor”.
“Nadie viene a emparejar, tirar piedras ni nada. Hay casas que tienen los caños rotos y pese a la cantidad de llamadas a Obras Sanitarias, nadie viene a arreglar nada. Esto siempre fue así, hace años que vivo en el barrio Pueyrredón y la situación no cambia”, aseveró.
Gladys apuntó a la falta de presencia estatal local: “No vienen nunca, ni ahora que están haciendo campaña. Vos llamas a quien quieras y nadie te responde, llamas al que está con el intendente y nunca puede, nunca sabe o nunca tiene. Te mandan a hablar con uno o con otro y te ganan por cansancio, después en redes sociales comparten que estuvieron en el barrio hablando con la gente.”
Consultada sobre hace cuánto tiempo que la situación permanece así, detalló que son aproximadamente 10 años de un mismo escenario. Como en otras zonas de la ciudad, la vecina remarcó que hay una falta de planificación total respecto las obras que se realizan: “Te asfaltan una calle por donde no entra nadie y después los vecinos tenemos problemas para ingresar”, contó.
Otra problemática que mencionó a MdpYa es la presencia de basurales a cielo abierto, si bien “cada tanto” concurren referentes del Municipio a limpiar, “es un desastre y un foco de infección”. La inseguridad también es otro tema que preocupa, sobre todo cuando oscurece,“tenes que salir entre 3 o 4 personas”, remarcó.
“Yo quise poner un taller para que los chicos puedan realizar algunas actividades, pero el Municipio me dio el pulgar para abajo”, denunció sobre diversas cuestiones que quiso implementar en la zona para contener a las y los jóvenes.
Ante la falta de respuestas del Estado Municipal, detalló: “Las personas que son pobres no tienen herramientas para superarse. No hay una posibilidad para que la realidad cambie, a uno no le gusta vivir en un barrio todo roto con una inseguridad que no se puede estar, pero es la casa de uno, no hay posibilidad de comprarse una casa en otro lado. Este barrio es tierra de nadie, llamas a la policía y te preguntan cuántas personas son y si sabés si tienen armas, ¿qué esperan? Que salgamos a preguntarles qué fierro tienen”, preguntó con ironía.
Gladys relató que la obra de su casa fue vaciada por dueños de lo ajeno. “Me dejaron la casa pelada, sin aberturas, maderas, materiales, no me dejaron nada. Tengo que seguir trabajando y romperme la espalda para terminar mi casa. Mis hijos y yo nos morimos de frío, tengo un hijo discapacitado y no tengo un marido que me ayude, realmente se aprovechan porque saben que estoy sola. Hasta ese punto llegamos en el barrio, no hay empatía, pena ni nada.”
La falta de presencia policial pone de manifiesto la crisis social que hay, sumado a esto, las condiciones del barrio se agravan día a día. La ausencia de la policial produce que algunas personas rompan con gomeras los postes de luz, produciendo una oscuridad general cuando cae el sol. Estas luminarias no son cambiadas, generando en la zona más problemáticas de las que ya tiene.
Lara E. Franco – Redacción MdpYa