Una fiesta electrónica que se desarrolló en MUTE parador del sur de la ciudad durante las celebraciones por el Año Nuevo tuvo cinco personas que debieron ser asistidas por personal médico tras sufrir cuadros de distinta gravedad.
Tres personas fueron intervenidas por padecer una intoxicación por consumo de alcohol y sustancias, mientras que otros dos casos fueron por “ataques de pánico” y fuertes “dolores abdominales”, pudiendo estos dos últimos haberse producido por lo mencionado anteriormente.
Pese a ello, las fuentes oficiales consultadas resaltaron que no se motivaron derivaciones a centros asistenciales y afirmaron que la asistencia se pudo brindar de forma satisfactoria con los puestos de emergencia colocados en el predio del lugar, que está sobre la ruta 11.
El operativo de salud estuvo a cargo de personal del SAME para poder atender cualquier eventualidad. Asimismo, hubo personal municipal en Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) que, pese a la retención de tareas, dio cumplimiento a las guardias mínimas establecidas.