Corea del Norte acusó a Estados Unidos de fabricar armas biológicas en Ucrania, sobre la base de denuncias hechas este año por Rusia que no han podido ser investigados por la ONU.

Washington “estableció muchos laboratorios biológicos en decenas de países y regiones, incluyendo Ucrania, haciendo caso omiso de los tratados internacionales”, escribió la agencia de noticias oficial norcoreana KCNA, que refleja la posición del Gobierno.

La nota agregó que esta información había sido “detectada” por Rusia.

En marzo pasado, Rusia acusó a Estados Unidos de financiar la investigación en el desarrollo de armas biológicas, en Ucrania, cuando su invasión del país europeo llevaba ya algunas semanas.

Un funcionario de desarme de la ONU dijo luego que su organismo no tenía autorización del Consejo de Seguridad de la ONU ni capacidad para investigar la denuncia, con Ucrania en medio de la guerra con Rusia.

Corea del Norte, un país con bastante buenas relaciones con Rusia pero enfrentado con Estados Unidos, que es el principal aliado de Ucrania y enemigo de Rusia, ha apoyado la invasión rusa de Ucrania.

El Gobierno norcoreano, una dictadura comunista, había dicho que la política exterior estadounidense, en particular impulsar la expansión de la OTAN hacia las fronteras de Rusia, era la “causa de fondo de la crisis ucraniana”.

Y este mes reconoció la independencia de Donetsk y Lugansk, dos provincias separatistas rusoparlantes de la región del Donbass, en el este de Ucrania, lo que llevó a Kiev a cortar sus lazos diplomáticos con Corea del Norte.

Estados Unidos financia laboratorios en Ucrania que hacen investigaciones con microorganismos causantes de enfermedades que pueden usarse como armas biológicas.

Sin embargo, Estados Unidos y Ucrania negaron que en ellos se desarrollen armas biológicas, algo que está prohibido por la ley internacional.

Estados Unidos, que le da armas a Ucrania para pelear con Rusia y que ha impuesto sanciones a Moscú para asfixiar su economía mientras libra la guerra, dijo que las acusaciones rusas tenían motivaciones políticas.

Izumi Nakamitsu, secretario general adjunto de Asuntos de Desarme de Naciones Unidas, dijo en marzo que “no tenía conocimiento de ningún programa de armas biológicas en Ucrania”, en una comparecencia ante el Consejo de Seguridad.

De todos modos, una semana más tarde, ante el mismo Consejo de Seguridad, Nakamitsu dijo que, aunque estuviera al tanto de algo que desconocía, no tenía autorización para investigarlo.

“También quisiera destacar que la ONU no tiene actualmente ni mandato ni capacidad técnico u operativa para investigar esta información”, señaló.

Las armas biológicas incluyen a cualquier patógeno, ya sea bacteria, virus u otro organismo que cause enfermedades, y suelen ser utilizadas como arma de guerra.