La Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) volvió a extender la moratoria para el pago de los préstamos otorgados por la entidad a jubilados, pensionados y titulares de beneficios sociales, como la Asignación Universal por Hijo (AUH) y otros. La medida se hizo efectiva a partir de la publicación en el Boletín Oficial de la Resolución 2/2020.
En el documento, que lleva la firma del subdirector del Fondo de Garantía Sustentable (FGS) de este organismo, Lisandro Cleri, se estableció que quedará suspendido “el pago de las cuotas para los créditos vigentes por los meses de julio y agosto” de este año.
Según se detalló en el texto, esta decisión se tomó porque la emergencia sanitaria que se declaró en el país producto del coronavirus “dura todo el tiempo que subsisten las causas que la han originado”.
La prórroga alcanza a todas las personas que hayan recibido un préstamo en el marco del Programa “Créditos ANSES”, quienes durante este periodo “no podrán solicitar el otorgamiento” de nuevos beneficios.
Además, se aclaró que para los titulares de Asignación Universal por Hijo (AUH) y Asignaciones Familiares (SUAF), la suspensión del pago de estas cuotas “dependerá que el menor por el cual se percibe la prestación no alcance durante ese lapso, la edad de 18 años, salvo discapacidad”.
Por otra parte, las autoridades del FGS de la ANSES precisaron que esta moratoria “quedará sujeta a la fecha de vencimiento del beneficio que perciben los titulares de prestación por Invalidez”.
Por último, aquellos que estén incluidos en el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), en las Prestaciones No Contributivas de Vejez, Invalidez y Madres de más de Siete Hijos (PNC) o en la Pensión Universal al Adulto Mayor (PUAM), quedan exceptuados “del límite de edad máxima establecido en las condiciones de acceso a los créditos que se considera para los beneficiarios a la fecha de finalización del pago de los préstamos”.
En diciembre del 2019, a pocos días de la asunción del nuevo Gobierno, la Anses anunció un plazo de gracia para el pago de las cuotas de los meses de enero, febrero y marzo. En ese momento, el objetivo oficial era mejorar los ingresos de bolsillo de ese segmento social, al mismo tiempo que aportar a una recuperación de la demanda agregada para mejorar el consumo y reactivar la economía.
Pero antes de que se volvieran a cobrar los pagos correspondientes de estas prestaciones, llegó la pandemia del coronavirus y en marzo, el objetivo de reactivar el consumo se modificó por el de atender las necesidades más inmediatas.
Los jubilados y beneficiarios de planes sociales cobraron un bono extra de $3.000 y se lanzaron otras medidas paliativas, como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) de 10.000 pesos, entre otras ayudas por parte del Estado.
Por su parte, la Anses extendió la moratoria de los créditos otorgados por el organismo a las cuotas de abril y mayo. De este modo, el período de gracia que se inició el 1º de enero pasado, que debía finalizar el 31 marzo y que posteriormente se amplió hasta el 31 de mayo, se prorrogó ahora hasta el 30 de junio, o sea, por un período total de seis meses.
Ahora, el organismo decidió seguir postergando el cobro de estos préstamos y suspendió las cuotas correspondientes a julio y agosto para “salvaguardar en lo posible un fin legítimo, como lo es el interés público comprometido en esta grave emergencia”.
En los considerandos, la Anses destacó que “las suspensiones anteriores no han implicado restricción alguna a la operatoria normal del Fondo durante el período analizado” y aseguró que esta nueva prórroga tampoco generará “restricciones para el período que se establece, toda vez que resulta ser un monto menor respecto a los activos de alta liquidez y los vencimientos próximos de instrumentos en cartera”.