El 42,8% de los chicos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) que acuden a comedores comunitarios tiene deficiencias en su nutrición, de acuerdo a un relevamiento publicado esta semana, lo que implica que cuatro de cada 10 menores no tiene una dieta completa.
De los 25.213 niños, niñas y adolescentes de la Ciudad y el Conurbano bonaerense que acuden habitualmente a los comedores de Barrios de Pie, al menos 10.791 de ellos tienen una falta de nutrientes, lo que los deja en una situación precaria al margen de la relación entre su peso y altura.
“La malnutrición sigue avanzando en los barrios pobres con el riesgo de instalarse sin ningún tipo de medida estatal que frene esta tendencia. En breve estaremos hablando de desnutrición”, señaló Daniel Menéndez, coordinador nacional de Barrios de Pie.
El relevamiento, que fue realizado por promotores de salud de la organización en sus comedores ubicados 28 distritos y 6 comunas del AMBA, incluyó los datos de menores de entre 0 y 19 años. “El número aumenta entre los menores de 10 y llega al 43,2%”, aclaró Menéndez.
Los datos son difíciles de leer, pero reflejan una situación muy específica: saciar el hambre con alimentos sin proteínas ni vitaminas permite a la persona vivir pero no desarrollarse plenamente.
Así, el 43,2% de los niños y niñas de entre 2 y 6 años sufre la malnutrición mientras que el 44,5% de 6 a 10 tiene el mismo problema, y el 39,0% de los menores que ya son adolescentes -hasta 19 años- presentan el mismo cuadro.
Lo que es más, se detectó que el 28,9% de los lactantes está malnutrido al punto de que alrededor de un 12% padece sobrepeso y obesidad porque sus cuerpos incorporan más carbohidratos que proteínas y vitaminas.
A propósito de los resultados de este relevamiento, desde Barrios de Pie reiteraron el pedido al Gobierno de que se declare la Emergencia Alimentaria.
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