Fuentes laborales informan a este medio que en la sucursal de Avenida Luro 3219 hubo un caso positivo en donde una empleada está contagiada.

Se trata de un contacto estrecho de contagiado en luroautohogar quién estaba positivo. Le avisaron desde el municipio que debían hisoparla y aislarla. Le realizaron la prueba pero le dijeron que debía seguir yendo a trabajar, por lo que no fue aislada.

Al salir positivo el resultado del marido, recién entonces la empresa accede a aislarla pero al tener contacto estrecho con sus compañeras a los dos días llegó la noticia que nadie quería sufrir: salió un caso positivo de una compañera de trabajo en la sucursal mencionada.

El positivo de la compañera no fue informado por la empresa, la contagiada fue a una clínica por su cuenta al sentir síntomas compatibles con covid19.

Después de días de comentarios de pasillo, con un caso confirmado pero sin avisar al personal pasaron tres días sin noticias oficiales hasta que el jueves pasado cuando se presentaron a trabajar las empleadas se encontraron con que iban a hisopar a todas. Tras los hisopados, como si nada hubiera pasado, las volvieron a hacer ir a trabajar sabiendo del positivo que había en la sucursal.

El viernes, con la mitad del personal aún si hisopar se sigue atendiendo, se desinfectó por la noche, nunca cerró y la atención al público con mayoría de gente adulta que concurre y corre serios riesgos.

En definitiva, se hisopó a parte del personal siendo el mensaje de la empresa “Es para su tranquilidad”, cuando en realidad es una obligación hisopar al personal, aislar al mismo 48hs, utilizar el listado de empresas autorizadas por el municipio para sanitizar el establecimiento el cual debe estar cerrado por 48hs.

La empresa sanitizadora debe extender un certificado el cual la empresa lo presenta al municipio para reabrir el local con otro personal mientras los que trabajaban allí deben estar aislados 14 días.

Nada de esto se está cumpliendo. No se respeto el protocolo, el establecimiento sigue abierto, todos clientes y empleados corren riesgos y el municipio debe controlar esta situación.

Los comercios, el cuidado de su personal y clientes en general, el estricto cumplimiento de los protocolos…Todo esto por ahora es parte de una realidad que no se hace visible y concreta.