La muerte del Jefe de Máquinas del buque potero XING SHI JI 89, bandera argentina de la empresa FENIX INTERNACIONAL capitales Chinos (vinculada a la armadora Zhejiang New Times International Fisheries CO., LTD ) hecha luz sobre los armadores que obligan a prestar títulos a extranjeros, cediendo el mando del buque, destino y la vida de sus tripulantes.
El Capitán o Patrón de Pesca argentino ocupa su cargo solo a efectos de las funciones del despacho del buque a la pesca, porque el Capitán es de nacionalidad china y él es quien manda, por orden de la empresa. Al personal embarcado argentino se los trata como esclavos, haciéndolos trabajar horas y horas hasta que no meten el último calamar en la bodega.
Treinta horas sin dormir es lo habitual y cotidiano cuando estás sobre el cardumen.Tuvo que la COVID 19 lo que destapara semejante atrocidad que vivimos desde hace décadas.
Esta vez, cobrándose la vida de un hombre que embarcó sano, hisopado y aislado.
Esto en términos internacionales es un CRIMEN que la Justicia llamará ABANDONO DE PERSONA AGRAVADO y lo pagará el Capitan o Patron de Pesca argentino, ya que él no hizo lo que debía hacer por Manuel Quiquinte, sabiendo que estaba hace varios dias con fiebre, que no cubría sus cuartos de guardias, que no tenían medicación alguna en su botiquín y que su estado se agravaba día a día.
No quiso navegar a puerto, ni pidió el traslado de emergencia en el helicóptero de Prefectura que tantas vidas ha salvado.
El Capitán debió pedir la evacuación aérea del tripulante en helicóptero ante el agravamiento del cuadro. Así hubiera evitado la muerte de Manuel!
Este hombre permaneció en su camarote varios dias muriendo, con sus compañeros avisando al Capitán de su estado crítico, hasta su dolorosa muerte.La empresa dando muestras de su desprecio por la tripulación argentina, jamás comunicó que tenía un tripulante con COVID a bordo, aislado y con fiebre y tos.
Al fallecer Manuel, el Capitán se comunicó con un médico en Punta Quilla quien le dijo que debía arribar a puerto y hacer todos los trámites legales, dado que la empresa y el chino que manda o sea el Capitán real del buque, querían dejar el cuerpo y zarpar inmediatamente con otro Jefe de Máquina, tal como hacen las empresas chinas en Montevideo: dejan un cadáver por mes.
El médico les informó que el buque debería quedar parado para una investigación, llena de tripulantes testigos sobre este CRIMEN. Las muertes por COVID en el mar no son accidentes cuando al tripulante se lo deja morir.
Esto que describo tiene una gravedad enorme, ya que estamos en manos de gente para quienes la vida del otro no vale nada. Y está demostrado, que la vida de Manuel fue menos importante para el Capitán chino y la empresa que unas toneladas de calamar.
Para los chinos valemos eso.
Más allá de nuestro convenio laboral, la OMI (Organización Marítima Internacional) ha dado directrices internacionales que el mismo Estado Argentino y los sindicatos aplicaron para las distintas flotas. Arriba de un barco chino con bandera argentina, no rigen.Aquí queda claro que tanto los directivos de la empresa CHINA como su capitán CHINO son los responsables del CRIMEN. Lo sabe el Juez y autoridades que los DIRECTIVOS DE LA EMPRESA FENIX INTERNACIONAL deben ser junto al Capitán procesados por este CRIMEN: eligieron la producción antes que la vida del Jefe de Máquinas argentino. Hoy lo lloran su mujer, sus hijos y toda la familia marítima.
El SICONARA Sindicato de Conductores Navales de la República Argentina fue quien avisó de la muerte de Manuel a su familia, dado que ni desde el buque ni de parte de la empresa les fue comunicado nada.FENIX INTERNACIONAL pretendía, reitero, dejar el cadáver y salir a la pesca con un nuevo Jefe de Máquinas, sin importarles no solo Manuel sino sus compañeros contagiados, que dieran positivo al ser hisopados de Prefectura al arribo a puerto. Para la empresa el cadáver no es costo, porque cubre el seguro.
La vida de cientos de compatriotas está en manos de chinos, a los que no les importamos, pero más allá, está en manos de Capitanes o Patrones de Pesca PRESTA TÍTULOS INMORALES que permiten a extranjeros, tirar pescado al mar y cometer toda atrocidad con la más absoluta impunidad.
Podrá el lector evaluar que escrupulos tiene este chino que debe ser DEPORTADO, y procesados los integrantes del directorio de Fenix (las empresas no se procesan, sí sus responsables) por el crimen de mi compañero Manuel Quiquinte.
En alta mar hacen lo que quieren según sus intereses.
Es hora que la Justicia procese al directorio de FENIX y al Capitán con penas ejemplificadoras, que los gremios se opongan a que estos asiáticos criminales pongan la vida de nuestra gente en peligro, y que los Capitanes y Patrones de Pesca se enteren que si algo pasa a su tripulación por su absoluta irresponsabilidad se exponen a perder la libreta de embarque y a procesos penales, para evitar que siga la impunidad.
Por Roberto V Maturana – Oficial de Marina mercante-Investigador.
Periodista Digital.