Afirman que en la misma no existe un reglamento de cursadas con perspectiva estudiantil, y que el actual régimen académico no ataca los problemas de deserción y atraso en la carrera.

Pía Quintana, presidenta del Centro de Estudiantes de Medicina, asegura que “a pesar de nuestros numerosos intentos, las autoridades no dan respuesta a las problemáticas estudiantiles” y a su vez cuestiona que sabiendo “que en las demás facultades hay reglas claras, derechos estudiantiles y excelencia académica, ¿por qué en la ESM no podemos tener un reglamento de cursadas?”.

A su vez, los estudiantes reclaman que el sistema de correlatividades vigente representa un obstáculo a la continuidad académica. Todas las materias tienen requisitos previos muy exigentes, ya que en cada una de ellas se necesita haber aprobado varias cursadas y finales para avanzar en cada asignatura.

La propuesta de Proyecto Medicina como conducción del Centro de Estudiantes trata de un Reglamento de Cursadas y Finales. El mismo prohíbe la superposición de parciales y finales en mismo día; amplía las mesas de finales de 5 a 7 por año; establece el derecho a revisión de exámenes; crea la figura del examen habilitante, para que los estudiantes tengan una chance más en caso de desaprobar un parcial o recuperatorio; exige que las cátedras establezcan un cronograma desde el comienzo de la cursada, para organizar mejor el estudio. Estos son algunos de los puntos incluidos en el proyecto, que tienden a atacar la discrecionalidad y equiparar los criterios entre las distintas materias de la carrera.

Pia Quintana afirma que “tener más derechos no implica menos excelencia académica, sino todo lo contrario” y exigen “una normativa que les permita organizar mejor sus tiempos de estudio, que no estén presionadxs por rendir un final del que depende su continuidad en la carrera, que sepan que hay reglas claras para cursar y aprobar. El objetivo es “mejorar nuestro proceso de aprendizaje y la formación” y “que nadie se quede afuera de la ESM”