El ente Municipal de Servicios Urbanos (EMSUR) realizó un segundo llamado a licitación privada para adquirir e instalar un sistema de videovigilancia en los cementerios municipales Parque y Loma. Con un presupuesto superior a los 6 millones de pesos, dos empresas se vieron beneficiadas para iniciar con las obras de rigor. Robos, vandalismo, problemas estructurales y falta de personal son algunos de los motivos que derivan en esta decisión. 

Las empresas oferentes Oaci y Bloquer fueron adjudicadas tras la apertura de sobres. El presupuesto total es de $6.422.543,00. Oaci, por su parte, se encargará de la provisión de 38 cámaras de seguridad, dispositivos de control y fuentes de alimentación, mientras que Bloquer se encargará de los cables eléctricos necesarios para la tarea. Aún no se conocen mayores detalles de los plazos para el inicio de las obras necesarias.

Hace más de un año, los concejales del bloque de Acción Marplatense presentaron la problemática que atraviesan los cementerios municipales ante el cuerpo deliberativo. Tras varias consultas y pedidos de informe, su sumó la Defensoría del Pueblo al reclamo de las familias que vivían una odisea a la hora de visitar la tumba o el nicho de un ser querido.

Los obstáculos que impiden acceder al recuerdo en paz son diversos: problemas edilicios estructurales, filtraciones en los techos, pérdidas de agua en baños y en lugares comunes, baños cerrados y clausurados hace más de dos años, faltantes o vandalización de tapas de nichos, falta de señalización y hasta falta de seguridad y de personal en general, principalmente en horarios de la tarde. 

Por este tema, el titular del EMSUR, Sebastián D’Andrea, debió presentarse ante del Concejo Deliberante en una comisión conjunta de Obras y de Derechos Humanos para oír los reclamos y brindar detalles de cómo se trabajaba en el área. En la ocasión, D’Andrea reconoció que unas 300 bóvedas habían sido vandalizadas en los últimos años, y que el ente no contaba con el presupuesto necesario para realizar un cambio significativo al respecto.

Se espera que la instalación de las cámaras y la correspondiente videovigilancia revierta, al menos, la situación de inseguridad que se vive en nuestros cementerios.