El primer ministro de Francia, Gabriel Attal, aseguró: “Todavía estamos lejos de haber llegado al final del camino. Pero paso a paso, la igualdad se va acercando. Al garantizar en nuestra Constitución la libertad de recurrir a la interrupción voluntaria del embarazo, concedemos una segunda victoria a Simone Weil, y a todas las que han abierto el camino. Sobre todo, mandamos un mensaje a todas las mujeres, vuestro cuerpo os pertenece y nadie tiene derecho a disponer de él en vuestro lugar.”
Previamente el senado francés aprobó el proyecto de ley con la modificación. El cambio constitucional era una promesa del presidente francés Emmanuel Macron, paralela a la violenta reacción contra el derecho al aborto en Estados Unidos.
Francia es el primer país del mundo que incluye explícitamente el acceso al aborto en su Constitución. El derecho al aborto fue reconocido en Francia en 1975, con la conocida como Ley Simone Veil, con Valéry Giscard d’Estaing como presidente.
La votación convierte a Francia en el primer país en tener un derecho constitucional al aborto desde que la ex Yugoslavia lo inscribió en su constitución de 1974. La Constitución de Serbia de 2006 mantiene ese espíritu y establece que “toda persona tiene derecho a decidir sobre el parto”.
Casi todo el salón en Francia se puso de pie en una larga ovación, y muchas legisladoras en el salón sonrieron ampliamente mientras aplaudían. Hubo escenas de júbilo y celebraciones en toda Francia, donde el derecho al aborto goza de un amplio apoyo popular: una encuesta reciente mostró un apoyo de más del 80%.
Con la incorporación del derecho al aborto a la Constitución, será mucho más difícil impedir que las mujeres interrumpan voluntariamente un embarazo en Francia, dijeron activistas por los derechos y la igualdad de las mujeres.
“Aumentamos el nivel de protección de este derecho fundamental”, afirmó Anne-Cécile Mailfert, de la Fundación de Mujeres. “Es una garantía para que las mujeres de hoy y del futuro tengan el derecho a abortar en Francia”. (Euronews)