Desde el Colegio de Ingenieros (CIPBA) destacaron la importancia de la obra pública para el desarrollo de la provincia de Buenos Aires y en ese sentido advirtieron que el rol del Estado es fundamental como “ordenador de los recursos estratégicos de todos los bonaerenses.”
“La ingeniería es una disciplina destinada a mejorar la calidad de vida de la población, y eso es solo posible a través de la intervención del Estado, fundamentalmente gracias a la obra pública y la planificación”, explicó Gabriel Crespi, Secretario de la entidad profesional.
En el mismo sentido el presidente del CIPBA, Alejandro Passarini, puntualizó que “la actividad de todos los ingenieros e ingenieras está íntimamente ligada a la obra pública, y por eso es que históricamente el Colegio apoyó los grandes proyectos de infraestructura a nivel nacional como Vaca Muerta y mas recientemente el gasoducto Néstor Kirchner”.
“El gasoducto es quizá el ejemplo mas claro de como el Estado puede tener un papel fundamental para propender al desarrollo de la economía nacional y las economías regionales. Solo hay que recordar que la inversión fue posible porque en medio de la pandemia se dispuso el pago de un aporte solidario de las grandes fortunas destinado en parte a tal fin”, recordó Passarini.
El dirigente agregó que “sin el puntapié inicial del Estado, es poco probable pensar que en medio de la retracción que significó la pandemia de COVID-19, el sector privado por si solo hubiera tomado la iniciativa de poner en marcha y terminar en tiempo récord una obra de semejante envergadura”.
“No se trata de anteponer lo público a lo privado, sino de comprender que hay áreas estratégicas para el desarrollo nacional en las que solo el Estado puede garantizar la ejecución de obras, la planificación y la inversión necesarias para generar puestos de trabajo, nuevos circuitos de producción, que en definitiva, forman parte de las mejoras en la calidad de vida de las personas”.
Vale recordar que el CIPBA no solo jugó un “papel fundamental en el apoyo a la puesta en marcha de la explotación del yacimiento de Vaca Muerta y la construcción del Gasoducto, sino que viene impulsando fuertemente la necesidad de avanzar rápidamente con la exploración y explotación de hidrocarburos offshore, y sobre todo con la implementación del denominado Canal de Magdalena, que modificaría las vías de ingreso navegables no solo a la provincia, sino a todo el país.
“Si a eso le sumamos un cambio en la matriz energética que nos permita el autoabastecimiento y la potencialidad que representa la existencia de enormes yacimientos de litio en las provincias del norte del país, estamos frente al desafío de dejar librado al mercado la utilización de esos recursos o ponerlos al servicios de un proyecto de desarrollo nacional que utilice esos recursos en pos del bien común y no solo con el objetivo de acumulación de riquezas para un solo sector”, concluyeron los profesionales.