El gobernador afirmó que, en caso de que el Gobierno decida venderla, su administración tomará medidas para evitar el desguace de la compañía.

El gobernador bonaerense Axel Kicillof rechazó categóricamente este lunes una eventual privatización de Aerolíneas Argentinas, y deslizó que su administración está interesada en hacerse cargo del control de la línea aérea de bandera si el Gobierno de Javier Milei insiste con venderla.

“Si el Gobierno nacional quiere vaciar o vender Aerolíneas Argentinas a una empresa extranjera o a un grupo amigo, la Provincia de Buenos Aires no lo va a permitir”, aseguró Kicillof durante una conferencia de prensa que dio en la Casa de Gobierno bonaerense.

En ese sentido, subrayó que la aerolínea de bandera es fundamental para el país y destacó su relevancia económica y social: “Es un instrumento central para la conectividad de la Argentina, es una fuente de ingresos y de bienestar inconmensurable. La Provincia sí la quiere. Esto requiere una serie de pasos institucionales, y hoy expresamos la vocación de empezar a dar esos pasos”.

“La Provincia plantea que si hay intención de transferir nosotros empezamos un camino con gobernadores y trabajadores: vamos a trabajar también con sector aerocomercial y turístico porque creemos que es de las mejores del mundo”, dijo al anunciar la compra de acciones ante un escenario de venta de la línea de bandera.

Asimismo, siempre con críticas a las políticas de Javier Milei, destacó: “El Gobierno nacional ha amenazado con venderla, disolverla, llevarla a la quiebra. Si la Nación plantea venta de paquete accionario o transferencia a trabajadores o declararla en quiebra o disolverla, nosotros lo vamos a impedir, en la medida de lo posible”, expresó el mandatario bonaerense.

“Ante la imposibilidad que tiene el gobierno nacional de gestionar nada queremos que se deje de mentir. No nos podemos dar el lujo para que liquide venda o mal venda a aerolíneas. Si el gobierno plantea liquidarla que sepa que el gobierno de la provincia la va a sostener. Aerolíneas no se vende: hay 21 destinos del interior a los que solo viaja la línea de bandera. Destinos a los que llama no rentables”, precisó. Y amplió: “Quieren cerrar vuelos. Estamos en la antesala de una estafa”.

“Hoy estamos a la espera pero preparándonos para una decisión: la provincia de Buenos Aires empieza a explorar todos los caminos para dar una respuesta. No estamos en condiciones de que el Gobierno destruya Aerolíneas. No podemos atravesar un vaciamiento ni una estafa. Nosotros vamos a impedir el desastre. La provincia tiene diferentes caminos, algunos necesitan de la Legislatura”, amplió desde la Casa de Gobierno.

Kicillof cuantificó los beneficios económicos para la provincia de Buenos Aires en 2.665 millones de dólares, sin contar impuestos, contribuciones y tasas. “Si la provincia empieza a perder vuelos esa será la pérdida para la provincia. Hoy llamamos a trabajar junto con los gobernadores y los trabajadores para sacarle más el jugo: la provincia de Buenos Aires tiene diez millones de pasajes, tiene mucho movimiento. Es fundamental que eso no cese”, cerró. (DIB)