Una vez sancionada en el Senado y que prontamente estará publicada en el Boletín Oficial modifica sustancialemnte la relación inquilinos-propietarios a la hora de alquilar.

Cerca del 17 % de los habitantes de Mar del Plata alquila una propiedad, según cifras que publicó en su momento el Indec.

El 52% de los inmuebles en alquiler son departamentos y de ese total casi 40% son de dos ambientes. Hablamos de personas que recién se independizan, parejas recientemente conformadas, entre otras vivencias. Hablamos del “empezar una nueva vida”

¿Qué impacto tiene en Mar del Plata?

En síntesis, la nueva ley extiende los contratos de alquiler de dos a tres años, amplía las opciones de garantía para los inquilinos, establece que la actualización del valor deberá ser anual y ya no semestral (número que se obtendrá del índice de precios y los salarios), obliga a declarar los contratos ante la AFIP, divide el pago de las expensas ordinarias y extraordinarias y reduce el depósito de garantía a un monto equivalente a un mes de alquiler.

Desde Inquilinos Agrupados, entidad que dio impulso al tratamiento de la normativa, destacan que se trata de “una ley mucho más justa para quienes alquilan” y que la ley “no afecta a los propietarios” sino que “limita mucho más la posibilidad de condicionar que tienen las inmobiliarias”.
Contratos y aumentos

Con la nueva ley, el plazo mínimo de contrato dejará de ser por dos años y será de tres. Se busca así brindar mayor estabilidad y reducir los gastos que conlleva cada renovación. Sin embargo, se podrá rescindir antes.

El presidente del Colegio de Martilleros indicó que, por un lado, “esto representa un problema” debido a la inflación y a la nueva modalidad de cálculo para establecer el valor del alquiler de un año a otro, pero a la vez reconoció que “para quien alquila es un trauma tener que renovar o mudarse cada dos años” por lo que “un año más implica un alivio”.

Los aumentos ya no serán semestrales, se aplicarán una vez al año. El cálculo se realizará contemplando las variaciones mensuales del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y el de salarios (RIPTE).Hasta ahora, propietarios e inmobiliarias imponían una suba fija.
Depósito

De ahora en más, se deberá abonar solo un mes de depósito equivalente a un mes de alquiler, y la devolución tendrá el mismo aumento que tuvo la renta. Es decir, al devolver el depósito este será igual al valor del último mes de alquiler.

Con esta modificación que beneficia claramente a los inquilinos, se pondría fin a las maniobras de algunas inmobiliarias que cobran hasta dos o tres meses de depósito, incluso al valor del segundo año.
Garantías, más opciones

A la hora de alquilar, la garantía representa un dolor de cabeza para muchos inquilinos. La nueva ley fija más opciones: los inquilinos podrán presentar un aval bancario, seguro de caución, garantía de fianza o una garantía personal, a modo de alternativa.

Expensas, otra carga más

La nueva ley establece de modo taxativo que las expensas extraordinarias serán responsabilidad del propietario, quedando a cargo del inquilino solo las ordinarias, que incluyen los gastos habituales del edificio (salario del encargado, limpieza y otros conceptos). Esta última instancia perjudica notablemente, comparado con la anterior, a los inquilinos