Así lo hicieron saber en un intercambio de información en la redes sociales.
Desde la Asamblea vecinal Luna Roja, balneario ubicado al sur de la ciudad que se encuentra clausurado, alertaron este lunes sobre la presencia de una maquina retroexcavadora que realizaba tareas de movimiento de piedras, suelo y materiales en la ribera y dentro del cauce de la desembocadura del Arroyo Lobería, poniendo en riesgo las condiciones naturales del ambiente.
El hecho fue informado este miércoles por vecinos de la zona mediante el grupo de whatsapp de la asamblea, donde indicaron que había “máquinas grandes” haciendo trabajos en la playa. Rápidamente, procedieron a hacer una inspección en el lugar, junto a integrantes de Policía Ambiental.
“El balneario Luna Roja está clausurado por vertidos de efluentes cloacales desde el 20 de enero. El Municipio le dio permiso para obras que tienen que ver con la reparación y el nuevo diseño del sistema cloacal. Ese permiso se agota ahí porque la facultad de policía en los arroyos la tiene un organismo provincial”, explicó Kanki Alonso, vecino y referente de la asamblea.
Personal de Hidráulica de la Provincia de Buenos Aires comunicó que ese tipo de máquinas no pueden intervenir el cauce o ribera del arroyo sin los permisos de ese organismo, que exige planos de prefactibilidad de obra y demás tipos de garantías. Además, cabe remarcar que se trata de una zona sensible por su condición biológica, ya destacada por diversos informes de esta asamblea.
“No puede ser que cualquier persona contrate una retroexcavadora y se le ocurra meterla en arroyo, que es un bien protegido por la provincia y forma parte del patrimonio natural. Más que preocupación hay indignación porque nosotros venimos realizando denuncias”, destacó.
Según indicó, desde el año 2002 el concesionario de la mencionada unidad turística fiscal cuenta con reiteradas denuncias por parte de los vecinos de zona sur.