Rompió el silencio: qué lo llevó a tomar la decisión, la charla con Popovich y la inesperada respuesta de uno de sus hijos
El bahiense contó todos los detalles de las situaciones que lo llevaron a poner punto final a su carrera profesional. Sus ganas de pasar más tiempo en Argentina y la comparación con Lionel Messi
El 27 de agosto de 2018 será recordado como el día en que Emanuel Ginóbili comunicó su retiro del basquet. El mejor jugador argentino de la historia puso punto final a su exitosa carrera y dejó un vacío enorme en el deporte nacional. Tan trascendental fue esta decisión que el propio Manu debió tomarse algunas semanas para digerirla y enfrentar a la prensa por primera vez.
Este sábado, Ginóbili se presentó ante los medios en una conferencia realizada en las instalaciones de San Antonio Spurs. Allí dio todos los detalles sobre cómo tomó la determinación, cómo fue la charla con el entrenador Gregg Popovich y qué planes tiene para el futuro.
“Durante toda la última temporada fui digiriendo la situación. La jugué pensando que iba a ser la última, pero dejé la puerta abierta en caso de que cambiara de opinión y de que cuando volviera de las vacaciones todavía estuvieran las ganas. Lo fui masticando y digiriendo de a poco. Al volver, me guardé un poco de lugar por si el volver a ver la cancha y a entrenar despertaban algo en mí, pero no, se cerró inmediatamente la puerta. No estaba listo para hacerlo de nuevo, ni física ni mentalmente. Ahí me convencí de todo, aunque ya estaba bastante encaminado”, explicó Manu.
En ese sentido, agregó: “Me guardé tiempo para ver si me venían ganas. Cuando me metí en el gimnasio y agarré la pelota, no me pasó nada. De hecho, me vi más lejos cuando vi cómo todos los chicos entrenaban y se preparaban para una temporada tan dura. Ahí la puerta se cerró definitivamente”.
Respecto de cómo fue la conversación definitiva con Popovich, reveló: “Vine a contarle que la decisión estaba tomada. Él me dijo que le hubiera gustado tenerme un año más, pero me vio muy convencido y entendió perfectamente, me dijo que posiblemente hubiese hecho lo mismo. Fue una charla bárbara y quedó en claro que era el fin de una etapa mía con él como jugador y coach, pero igual voy a estar acá, lo voy a ayudare en lo que pueda y compartiremos mucho tiempo juntos”.
Uno de los factores clave para el retiro fue las ganas de pasar más tiempo con su familia. Sin embargo, el bahiense contó a modo de chiste que uno de sus hijos le cuestionó la decisión que había tomado con una excusa muy peculiar.
“Cuando les preguntamos a los chicos qué pensaban, si estaban contentos de que papá no iba a viajar tanto, de que íbamos a ir más a la Argentina, Nico dijo que no quería que me retirara. Le pregunté por qué y me dijo: ‘Porque el pollo frito en el estadio es muy bueno’. ‘Pero te compro pollo frito en otro momento”, le contesté”, relató el ya ex jugador entre risas.
También influyó en la determinación las ganas de pasar más tiempo con su familia en la Argentina. El bahiense adelantó que su idea es pasar los veranos en el país, algo que no pudo hacer en los últimos 20 años por sus compromisos deportivos.
Para Manu, el momento más brillante de su carrera fue el campeonato con los Spurs en el 2014: “Me llegó en momento distinto de mi vida, con tres hijos, después de una frustración muy grande el año anterior. Fueron siete años después del último título y le habíamos perdido el gusto. Ganarlo de esa manera, jugando tan bien, fue un momento increíble”.
Consultado sobre las comparaciones con Lionel Messi, Ginóbili respondió de acuerdo a la humildad que lo caracteriza: “Él es el mejor del mundo y yo uno más en la NBA. Lo mío se destacó mucho porque vengo de un país con poca tradición de jugadores de basquet con cierto éxito, pero Messi es uno de los mejores jugadores de la historia”.
Finalmente, dejó una reflexión que es una lección de vida: “Podría haber ganado algún campeonato más, un Mundial, una Liga Nacional en Argentina, pero ¿qué cambiaba? Era una estrellita más en el currículum, algo totalmente irrelevante. Lo más importante no son los campeonatos, sino las historias, las experiencias, los amigos, el aprendizaje de los buenos y de los malos momentos. Eso te termina haciendo mejor persona, mejor padre, mejor marido o mejor ciudadano”.