Emoción. Unión. Empoderamiento. Esas son algunas de las palabras que toman fuerza este fin de semana en Trelew, donde tiene lugar, desde el viernes, el 33° Encuentro Nacional de Mujeres, y donde algunas espacios advierten que el número de asistentes supera las 50.000.

Como todos los años, miles de mujeres viajaron de diferentes rincones del país para encontrarse entre talleres sobre género y su abordaje en diversos ámbitos como el de la salud, el de los medios de comunicación o, incluso, la economía y la educación. Como todos los años, miles de mujeres aseguraron que es en el debate colectivo donde se enriquece un movimiento, una idea, un proyecto y, sobre todo, donde se definen pasos decisivos y líneas de acción que culminan, como pasó con el proyecto por la interrupción voluntaria del embarazo, en sesiones históricas en el Congreso de la Nación.

Si bien el balance del 8A (modo en el que se simplificó la jornada de debate en el Senado, el último 8 de agosto) y lo que significó para todo el movimiento feminista ya se había abordado en el interior de los respectivos colectivos, el ENM terminó de confirmar lo que ya esa madrugada del jueves 9 de agosto las calles gritaron: la ola verde no retrocedió, está tomando fuerza.

Así es que la idea de nuevas estrategias para obtener un triunfo legislativo definitivo el año próximo marcó la dinámica de muchos de los talleres y cada charla informal entre mates y tiempo libre.

El comunicado de apertura del encuentro así también lo ratificó: “Este año la marea verde demostró que la persistencia organizada de las mujeres y cuerpos gestantes logra, más tarde o más temprano, incidir en la agenda pública y transformar los límites de lo posible y lo deseable”. “Si bien el debate parlamentario no plasmó la reivindicación de miles por la autonomía de sus cuerpos, las jóvenes que se incorporaron al activismo de esta marea tan política como afectiva ya no conciben la idea de que haya alguien más que les imponga qué hacer con sus cuerpos y vidas. Es indiscutible que este Encuentro estará atravesado por las miles que han llegado para evaluar lo recorrido hasta aquí e imaginar nuevas y mejoradas estrategias para que sea ley”, agregó.

En un discurso que no dejó de lado las críticas al ajuste económico del gobierno de Mauricio Macri, con el que aseguran que las mujeres se ven profundamente más afectadas (según los números del Indec, la tasa de desocupación nacional es de 9,6%, mientras que la feminina es del 10,8%) la comisión organizadora también apuntó a resistir y oponerse al fortalecimiento de ideas conservadoras en la región. “Hoy el movimiento organizado de mujeres y los feminismos conformamos el factor social y político con más potencia transformadora en toda América Latina. Pero tenemos que estar atentas, unidas y ensayar mejores y nuevas estrategias para enfrentar la reacción de sectores conservadores bajo ideologías fundamentalistas y fascistas”, sentenciaron.

La presencia de marplatenses

Mar del Plata también estuvo presente en el Encuentro, a través de integrantes de diversos espacios feminista de origen local que se organizaron para viajar en colectivos y autos particulares. Para conocer de primera mano cómo se vivieron los primeros momentos del tradicional evento, LA CAPITAL  y MDPya dialogó con Elvira Houchberg, de la Multisectorial de la Mujer de la ciudad.

“La apertura del Encuentro fue realmente emocionante. Vivimos un autódromo repleto de mujeres de todo el país. No había una que no tuviera un pañuelo verde. Estaban en los cuellos, en las muñecas, en las cabezas, en las mochilas. La verdad que fue una verdadera marea verde”, señaló.

La dirigente también destacó la “alegría especial” que tuvo la edición de este año por tratarse de la primera vez que el Encuentro se realiza en la Patagonia, algo muy esperado, dado que profundiza el carácter federal del espacio, que busca siempre desarrollarse en espacios que no sean Buenos Aires.

Según señaló, minutos después de la apertura, que tuvo lugar el sábado por la mañana, se dieron inicio a los talleres, que culminarán este domingo por la tarde dándose lugar a los debates finales. Finalizados éstos y determinados los puntos principales a desarrollar en el documento de cierre y, también, la sede del 34° Encuentro, las miles de mujeres se dispondrán a realizar la “gran y tradicional marcha”.