El creador de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) Marcelo Sain ya fue citado a declarar. Es por la causa de la muerte del ex fiscal Alberto Nisman y en carácter de  testigo, por primera vez tras haber afirmado que el empleado informático Diego Lagomarsino, procesado como partícipe necesario del homicidio de Alberto Nisman, ofreció ser “informante” de dicha fuerza de seguridad.
Además, la Justicia citará a la abogada Olga Gómez, madre de Pedro, una de las víctimas de la tragedia de República Cromanon, puesto que el ex esposo de ella, también letrado, había confiado que Lagomarsino era la misma persona que realizaba espionaje en algunas marchas que habían hecho en reclamo de justicia por ese episodio.
También convocará a un espía de la Agencia Federal de Inteligencia que hace al menos 14 años estaba afectado a la custodia de Nisman y que tuvo tres contactos telefónicos el 19 de enero de 2015, al día siguiente de la muerte del fiscal, con Rubén Benítez uno de los policías federales procesados por incumplimiento de los deberes de funcionario público y encubrimiento.
Sain había señalado públicamente que en 2005 Lagomarsino le ofreció a él ser “informante” de la Policía de Seguridad Aeroportuaria de la cual él estaba al frente.
“En 2005 creo recordar que se fue a ofrecer como servicio.
Decía que podía entregarme organizaciones narcotraficantes. Se decía que venía recomendado por un oficial del grupo Halcón y que lo primero que había pedido era plata, y como se le dijo que habría dinero si entregaba, se fue asegurando que él hablaba sólo de plata”, señaló Saín en declaraciones a la prensa.
Ahora Saín fue citado por primera vez a declarar como testigo y la audiencia será esta semana en la Unidad fiscal que lleva adelante la investigación por la muerte de Nisman, a cargo de Eduardo Taiano.
Otra de las dudas que alimenta la sospecha sobre el pasado de Lagomarsino es la declaración pública hecha por el abogado José Iglesias, quien es padre de una de las 194 víctimas de la tragedia de República Cromañón, y refirió haber visto a Lagomarsino sacando fotos en algunas marchas que hicieron los familiares de las víctimas reclamando justicia.
Si bien luego se presentó otra persona ante la Justicia que tendría algún parecido a Lagomarsino pero que no es el empleado informático, ahora se citará a la ex esposa del abogado Iglesias, para corroborar si ella cuenta con información al respecto.
No son las únicas declaraciones testimoniales fijadas para las próxima semanas pero sí las más inmediatas: entre ellas también figura la de un espía de la ex Secretaría de Inteligencia que formó parte de la custodia de Nisman en 2004.
Se trata de una persona apodada “Cato” y que fue introducido en la causa por el custodio de Policía Federal Rubén Benítez, quien relató que lo había conocido cuando se hizo cargo de la seguridad de Nisman.
Según Benítez, “Cato” y otro agente de nombre José Luis tenían a cargo la custodia de Nisman, la cual luego quedó bajo protección de la Policía Federal, y recordó que aquel lo había llamado telefónicamente “para ver cómo se encontraba”.
Lo cierto es que el fiscal Taiano acreditó que hubieron tres contactos telefónicos entre Benítez, entonces custodio de Nisman, y “Cato” el 19 de enero de 2015, al día siguiente de la aparición sin vida del fiscal.