Aconteció durante el transcurso del fin de semana en el balneario Ocean Club. Los administradores les explicaron que la playa era “un lugar de familia”. Los jóvenes harán una protesta para repudiar el acto homofóbico.
Los protagonistas de lo ocurrido fueron Gustavo Posati y su pareja Mariano Domínguez, quienes contaron lo sucedido a través de las redes sociales y también presentaron la denuncia ante al Inadi.
“El viernes 4 de enero fuimos a Ocean Club con Mariano, mi pareja, y con Sebastián, un amigo. Su papá es socio de la concesión privada que tiene el club en Playa Grande. Estuvimos todo el día tomando mate, escuchando música… Es un lugar privado que tiene el Ocean Club que es bastante elitista, pero estuvimos super tranquilos, realmente no pasó absolutamente nada fuera de lo común“, contó Gustavo en diálogo con SentidoG.
Según relatan los denunciantes en este sitio web, el acto discriminatorio ocurrió al día siguiente cuando quisieron volver a ingresar al balneario. “La gente de Ocean Club se comunicó con el padre de Sebastián y le dijeron que solamente podía ir él sin invitados porque el día anterior habíamos estado haciendo ‘escenas gays’ y nos habíamos estado besando, lo cual no fue así. Nos habremos dado un beso, nos habremos dado la mano, pero nunca hubo una escena zarpada ni nos pusimos a chapar. No tenemos necesidad de ponernos a hacer ningún tipo de escena en la vía pública con mi pareja, vivimos juntos hace un año y medio. Y somos ambos adultos y super responsables, no somos desubicados ni mucho menos“, aclaró Gustavo respecto a las acusaciones de parte del club. Y agregó: “Quisimos entrar igual y nos pararon en la puerta y nos dijeron que no podíamos ingresar. Pedimos una explicación y nos dijeron que una señora se había quejado de que el día anterior nos habíamos estado besando y que no podíamos hacer eso porque era un ‘lugar de familia’. Nosotros respondimos que estamos casi casados y que también somos familia, que el concepto de familia ya no es más el de mamá y papá solamente. Nos dijeron igualmente que no, que no podíamos entrar”.
Finalmente Gustavo, Mariano y Sebastián pudieron ingresar al balneario y pasar el día tal como lo habían hecho el viernes. Pero aseguraron que luego el club decidió echar a su padre como socio.
Ante lo ocurrido, la pareja realizó la denuncia. “Lo hablamos con una ONG de Mar del Plata, con el INADI y con gente del área de discriminación del gobierno de Mar de Plata”, contaron.
En repudio a lo sucedido se organizó una movilización el 18 de enero a las 14 frente al balneario.