Un trabajador de delivery denunció que el pasado viernes 26 de julio fue víctima de violencia institucional en un operativo de tránsito de la zona de Plaza Mitre. Esa noche, el joven realizaba repartos cuando agentes de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) le solicitaron que frene su moto para constatar los papeles del vehículo.
Lo que parecía un simple trámite comenzó con modos bruscos que, en un principio, solo ostentaban falta de cordialidad por parte de los uniformados.
El conductor entregó los papeles solicitados: tarjeta verde, licencia de conducir, seguro y VTV. Según su narración, mientras aguardaba la constatación por parte de los agentes, el trabajador se inclinó sobre uno de los vehículos oficiales: “parate bien y callate la boca”, le dijo rápidamente la única mujer que formaba parte del operativo, luego de empujarlo. Ahí la noche empeoró.
“Me estas faltando el respeto desde que frené. Estás muy equivocada. ¿Por qué no te sacas el uniforme y lo hablamos de otra forma?”, incitó el repartidor. “Mañana termina mi guardia. Ya se tu dirección, mañana voy a tu casa y lo arreglamos”, habría respondido la uniformada.
Empujones, algunos golpes y hasta escupidas denuncia haber sufrido el distribuidor por al menos media hora hasta que lo dejaron retirarse del sitio. Antes de ello, tomó su celular y procedió a grabar a los agentes y pedirles que se identificaran, pero los cuatro hombres y la mujer se negaron a hacerlo.
El joven dijo a MdpYa que se dirigió a dos dependencias distintas a realizar la denuncia por lo ocurrido, pero se la rechazaron tras argumentar que no pueden tomar denuncias por abuso de autoridad.
