Familiares de las víctimas del Rigel, el pesquero marplatense que naufragó en junio del año pasado en aguas patagónicas, se mostraron molestos por no haber sido recibidos por el Presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal en su reciente paso por Mar del Plata.
Miguel Osorio, el padre de uno de los tripulantes, consideró que los mandatarios “hacen oídos sordos” al reclamo que mantienen hace meses, y que consiste en la disposición de buzos para que puedan recuperar los cuerpos del casco que quedó hundido en el mar.
“Es lamentable porque ellos son el Estado y los que tienen que poner las herramientas necesarias para que bajen los buzos y recuperar los cuerpos de nuestros hijos”, consideró, en declaraciones a elmarplatense
Pese a ello, Osorio aseguró que se insistirá por la necesidad de un encuentro con la espera de “ver si está la delicadeza de atender a las familias alguna vez”. “Hace 8 meses que estamos así y no tenemos una respuesta. Es muy insensible esto. Sólo queremos los cuerpos para despedirlos como hay que hacerlo. No podemos cerrar el duelo de otra manera”, remarcó.
Además, el papá de Cristian, el auxiliar de máquinas del Rigel, también cuestionó al Intendente Carlos Arroyo, con quien sí mantuvieron un encuentro pero que no dejó mayores conclusiones. “Le pedimos una ayuda psicológica y la verdad que tampoco recibimos nada. Lo único que recibimos en todo este tiempo son promesas”, afirmó.
Un desencuentro similar había tenido lugar en noviembre pasado, cuando Macri y Vidal se acercaron a Mar del Plata. El jefe de Estado lo había hecho para participar del homenaje a los tripulantes del ARA San Juan, a un año de su desaparición, y la gobernadora para lanzar la iniciativa turística “Mar del Plata te hace feliz”, que incluye descuentos y promociones con distintas cámaras del rubro.
El buque Rigel zarpó el 5 de junio de 2018 del Puerto local rumbo al sur para abocarse a la pesca de langostinos y el último contacto que tuvo con las autoridades fue alrededor de las 23 del viernes 8 de junio. Iba a la búsqueda del langostino que por esa época abunda en las costas de Chubut y cuyo valor de venta es mayor al de cualquier otro marisco.
El sábado 9 de junio fue hallado un cuerpo en la zona donde se buscaba al pesquero y finalmente se confirmó que era el de Salvador Taliercio, capitán de la embarcación.
Pero el pesquero tenía otros 8 tripulantes a bordo: el segundo patrón Rodrigo Sanita, el jefe de máquinas Néstor Rodríguez, el auxiliar de máquinas Cristian Osorio y los marineros Amadeo Jonatan, Nahuel Navarrete, Carlos Daniel Rodríguez, Pedro Mierez y Rodrigo Blanco.