En la causa tomó intervención el titular de la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI) Nº5, Alejandro Pellegrinelli, en reemplazo por licencia de Rodolfo Moure, quien había quedado a cargo de la fiscalía descentralizada de Miramar.

El descubrimiento fue alertado por los propios padres del nene, que había sido inhumado el 5 de julio.

Tras esta notificación, la policía exhumó el féretro y se verificó que estaba vacío, por lo que se inició una causa para investigar lo ocurrido.

Las fuentes aseguraron que ya se avanzó con la realización de distintas diligencias, como la recopilación de algunos testimonios, pero aseguraron que todavía no hay mayores indicios que permitan sostener una hipótesis en torno al hecho denunciado.

Asimismo, recordaron que la profanación de una tumba no constituye un delito por sí misma, salvo que haya otras circunstancias involucradas como el reclamo de dinero, por lo que la Justicia intenta avanzar en esa línea para determinar el grado de la investigación.