Patricio, uno de los vecinos del barrio nos describió el estado desastroso del barrio de nuestro sur.

Nos precisó que su  su reclamo, al igual que otros vecinos, es por el mal estado de las calles del lugar y resaltaron la necesidad de contar con luminarias en el barrio.

“Hay muchísimo barro y no se puede transitar”, expresó al tiempo que agregó que las calles “están de terror, todas destruidas” a tal punto que en algunas zonas los vecinos decidieron poner sogas, a modo de prevención y advertencia, para que los autos no se “encajen”: “Ya no sabemos qué hacer. Se encajan los camiones de residuos, los colectivos, un desastre total” nos aseguró con malestar.

Patricio nos comentó que trabajan en “juntar firmas y llevarlas a la Municipalidad”, sostuvo.

La calle principal, la 461, desde la entrada por la costa hasta la avenida Jorge Newbery está destruida. Las paralelas, la 459 o la 463, se encuentran en el mismo estado.

Con las tormentas, los días subsiguientes hay ocasiones en que los colectivos no ingresan y el barrio lo sufre.

“Los vecinos nos estamos juntando y haremos algo para visibilizar el estado desastroso en que vivimos. A eso, agregale la falta de luminarias. De terror” finalizó Patricio.