A las 8.30 comenzaron agruparse centenares de taxistas con sus vehículos en el cruce de Güemes y avenida Colón, y dos horas mas tarde comenzaron una movilización por las diferentes calles de Mar del Plata, lo que provocó inconvenientes en el tránsito.
Minutos antes de las 11, los choferes volvieron a detener la marcha sobre la costa, donde se formó una caravana de más de diez cuadras de vehículos de alquiler.
El taxista y dirigente gremial Pablo Sánchez expresó a Télam “la medida empezó hoy y por tiempo indeterminado hasta que el intendente (Guillermo) Montenegro nos atienda y nos de una respuesta satisfactoria a nuestro pedidos”.
“Nos quedaremos acá (pleno sector costero de Playa Grande) hasta que el intendente o Santiago Bonifatti (secretario de Gobierno) nos atienda, que venga hablar con nosotros y nos asegure que no permitirán que funcionen estas aplicaciones que en si actúan bajo la ilegalidad. A nosotros para circular, para funcionar, el Municipio nos pide circular bajo ciertas normas. Es una competencia desleal”, sentencio el gremialista.
Hace una semana atrás las cooperativas de taxis y remises habían anunciado que si el Gobierno Municipal no los atendía y escuchaban sus reclamos iban a realizar un paro y movilización por las calles céntricas de Mar del Plata en plena temporada de verano y cuando la ciudad vive una de sus mejores veranos.
Por su parte, Carlos Seip de la cooperativa de taxis de excombatientes, sostuvo “el intendente hizo oídos sordos a nuestros reclamos”.
“Nosotros queremos que Montenegro en vez de hacer política y pensar en las elecciones nos atienda y no permita el funcionamiento de aplicaciones que no tienen autorización municipal para circular como transporte publico”, indicó Seip durante la protesta.