Por Sergio Salinas Porto – Presidente de Internauta Argentina, Asociación Argentina de Usuarios de Internet
Una tecnología que ha revolucionado la forma en que interactuamos con dispositivos electrónicos es, indudablemente, el NFC o Comunicación de Campo Cercano (NFC por sus siglas en inglés).
Esta tecnología permite el intercambio de datos entre dispositivos a muy corta distancia (no más de 15 cm), haciendo que tareas como los pagos móviles y la transferencia de información sean mucho más rápidas y seguras.
Desarrollada en los años 2000, NFC permite la comunicación inalámbrica de corto alcance entre dispositivos compatibles a través de la identificación por radiofrecuencia, operando mediante campos electromagnéticos y permitiendo el intercambio de datos simplemente acercando dos dispositivos.
En un mundo donde cada vez dependemos más de este tipo de tecnología, el NFC se ha convertido en una herramienta esencial, integrándose en numerosos aspectos de la vida cotidiana y la tecnología móvil.
Cuando dos dispositivos que cuentan con este sistema se acercan, la tecnología NFC comienza a funcionar. Es una evolución de la tecnología sin contacto que no solo sirve para realizar pagos, sino también para intercambiar todo tipo de información.
Esta innovación tecnológica puede funcionar de dos modos: activo o pasivo.
- Activo: Ambos equipos con chip NFC generan un campo electromagnético e intercambian datos.
- Pasivo: Solo hay un dispositivo activo y el otro aprovecha ese campo para intercambiar la información.
Alguien podría preguntar, ¿hay alguna diferencia entre NFC y Bluetooth? La respuesta es sí.
Aunque ambos permiten la comunicación inalámbrica, NFC y Bluetooth difieren significativamente:
- NFC es ideal para la transferencia de datos a corta distancia, establece conexiones más rápidas y consume menos energía.
- Bluetooth cubre distancias más largas y es más adecuado para el intercambio continuo de datos a lo largo del tiempo.
Aplicaciones del NFC
La tecnología NFC ofrece una amplia gama de aplicaciones más allá de los pagos electrónicos.
En el día a día, se utiliza para emparejar dispositivos Bluetooth de manera rápida, leer etiquetas inteligentes en museos y tiendas, y para el acceso sin contacto en sistemas de transporte público, como la carga de la tarjeta SUBE. En el ámbito industrial, NFC simplifica la gestión de inventarios y el seguimiento de activos, ya que las etiquetas NFC pueden contener información relevante sobre los productos.
Pero esto es solo el comienzo. El futuro del NFC se perfila aún más prometedor e integrador. Se espera que esta tecnología evolucione para facilitar una mayor interacción con el Internet de las Cosas (IoT), permitiendo un control más eficiente de dispositivos en el hogar y la oficina.
Además, se prevé una mayor adopción en sectores como la salud, para el monitoreo de pacientes y medicamentos, y en la seguridad personal, como en sistemas de identificación y acceso. La capacidad del NFC para conectar el mundo físico con el digital seguirá siendo un factor clave en su desarrollo y aceptación.
Temas de seguridad y NFC
La seguridad es una preocupación clave cuando se trata de tecnología NFC, especialmente en transacciones financieras. Aquí tienes algunos consejos para mantener tus datos seguros al usar este tipo de sistema:
- Activar la autentificación: Utiliza métodos de autentificación como PIN, huella digital o reconocimiento facial para aprobar transacciones NFC.
- Desactivar NFC cuando no se use: Aunque NFC requiere proximidad cercana para funcionar, es una buena práctica desactivarlo cuando no está en uso.
- Mantener el software actualizado: Las actualizaciones de software a menudo incluyen parches de seguridad para proteger contra vulnerabilidades.
- Usar aplicaciones fiables: Descarga aplicaciones de pago y otras aplicaciones NFC solo de fuentes confiables.
- Estar alerta a los terminales de pago: Asegúrate de que los terminales de pago NFC sean legítimos y no estén manipulados.
El futuro del NFC
La tecnología NFC sigue avanzando y se perfila como una parte esencial de nuestro futuro digital. Con su adopción creciente en diversas industrias, es el momento ideal para que tu negocio explore cómo prepararse y sacar el máximo provecho de las oportunidades que ofrece el NFC.
Tendencias y perspectivas de la tecnología NFC
El NFC ya ha demostrado su valor en aplicaciones como los pagos móviles, la gestión de la cadena de suministro y la seguridad en el acceso. No obstante, la evolución tecnológica y las nuevas tendencias indican que aún hay mucho más por descubrir.
Uno de los desarrollos más prometedores es la integración del NFC con el Internet de las Cosas (IoT). La combinación de estas tecnologías permite una comunicación más fluida entre dispositivos y sistemas, creando redes más inteligentes y eficientes. Esto puede tener aplicaciones en una variedad de campos, desde la automatización del hogar hasta la gestión de ciudades inteligentes.
Se anticipa que la adopción de los pagos móviles seguirá creciendo, a medida que más consumidores descubran la comodidad y seguridad que ofrecen. Esta tendencia también está impulsando la innovación en áreas como la identificación digital y la autenticación biométrica, donde el NFC puede jugar un papel crucial.