Se registraron ráfagas de 100 kilómetros por hora que provocaron numerosas caídas de árboles y postes. Un hombre falleció el domingo en Senillosa.

Una persona murió y numerosos árboles y postes cayeron como consecuencia del viento que azotó el fin de semana a la provincia de Neuquén.

En la localidad neuquina de Senillosa, un hombre falleció el domingo cuando se encontraba en el techo de una vivienda tratando de evitar que la estructura cediera por las condiciones climáticas y el viento “lo embolsó”.

El hombre cayó y falleció como consecuencia de las múltiples fracturas, según informó a la prensa local Juan Carlos Yanten, a cargo de Defensa Civil de la localidad.

En la capital provincial, entre el sábado y el domingo, se reportaron 40 árboles y 30 postes telefónicos caídos, voladuras de techos menores e inconvenientes de mampostería en edificios, indicó el subsecretario de Medioambiente y Protección Ciudadana, Francisco Baggio.

El funcionario capitalino detalló que la ráfaga más intensa fue de 102 kilómetros por hora y resaltó que “fue la más fuerte que hemos tenido en los últimos cuatro años”.