Por primera vez en la ciudad de Mar del Plata y con la actuación del abogado Julio Hikilo de la Casa del Trabajador, en representación del Sindicato Argentino de Trabajadores a Domicilio, Textil y Afines (Satadtya), el empresario abonó a la trabajadora un total de $1.000.000.
El 25 de agosto se conoció la noticia. Una trabajadora de la ciudad que durante años se desempeñó para una “importante empresa textil”, recibió el reconocimiento e indemnización correspondiente.
“Hay una cosa paradójica, ella necesitaba trabajar cuatro meses para comprarse una campera de las que cosía. Realizaba entre 10 y 12 camperas por día y necesitaba trabajar cuatro meses para adquirir una sola prenda”, detalló Julio Hikilo a MdpYa.
El profesional remarcó que el grueso de la producción textil se hace de esta manera, con “costureras que cobran salarios por debajo de la línea de pobreza. “
Las trabajadoras no tienen ningún tipo de reconocimiento, aseguró el abogado: “Esto puede ser un precedente que vaya generando consciencia económica respecto a los demás empresarios, para que empiecen a registrar a las trabajadoras”.