En la localidad de Neuquén, una pareja asistió al Policlínico de Neuquén para dar a luz a su bebé y al momento de nacer, el niño había fallecido en el vientre.
No obstante, esto no es todo, ya que los padres del bebé denuncian pala praxis.
Luego de que el pequeño naciera, los padres se enteraron que ni siquiera podían ver al bebé dado que el personal médico ya lo había “desecho”.
Florencia Aparicio y su marido Rubén notificaron en la denuncia que al llegar al establecimiento se llevaron la gran sorpresa. “Yo estaba de casi 35 semanas. Me hicieron unos análisis y no se lo escuchaba, entonces me dijeron que había fallecido y que me tenían que hacer una cesárea”, recordó la mujer en diálogo con LM Neuquén.
A su vez, contó que al día siguiente de la operación, desde el nosocomio informaron que iniciarían el trámite para realizar una autopsia al cuerpo del bebé y determinar el motivo del fallecimiento.
“El viernes siguiente fui a sacarme los puntos. Mi obstetra estaba nervioso y me dijo que habían llevado el cuerpo a cremación porque lo habían dejado en una sala de restos patológicos donde había un hombre que falleció por COVID-19 y tuvieron que retirar todo”, contó.
Esto no es todo, dado que inmediatamente, los padres del pequeño asistieron al crematorio para recuperar las cenizas del pequeño, donde se les informó que dicha cremación no estaba registrada.
“El 8 de octubre, un doctor me entregó una carta que explicaba que por culpa nuestra, por no retirarlo a tiempo, ellos lo entregaron como residuo patológico. Pero antes de darme el sobre, me pidió disculpas y dijo que fue un error de manejo de ellos. Yo grabé esa conversación. En la carta, en ningún momento se hicieron cargo y nos toman de ignorantes”, señaló.
Finalmente, la joven señaló: “Estamos muy mal. Nosotros esperábamos tener a ese bebé. Queríamos al menos cremarlo y poner sus cenizas en un nicho con las de su abuelo, y ahora no tenemos ni dónde ir a prenderle una velita o llevarle flores”, lamentó
lmn