Unicef alerta que más de 1.500.000 de chicos pasa hambre en la Argentina y lanza una campaña.

Unicef Argentina lanzó este martes la campaña “El hambre no tiene final feliz” y advirtió que más de 1.500.000 chicos saltean al menos una comida al día. El objetivo es difundir la situación de pobreza que enfrentan las infancias y llamar a la población a contribuir para mitigar esta realidad.

La octava encuesta a hogares con niñas, niños y adolescentes, publicada por Unicef Argentina este año, revela que un millón de chicas y chicos se van a la cama sin cenar, cifra que se eleva a un millón y medio si se incluyen aquellos que se saltean alguna comida durante el día. En el caso de las personas adultas que viven en esos hogares y que se saltean alguna comida, el número se eleva a 4.5 millones, en muchos casos porque priorizan que sus hijos o hijas puedan alimentarse.

Además, más de siete millones de chicas y chicos viven en la pobreza en Argentina. En este contexto, a través de un spot central protagonizado por una madre con su hijo, la campaña de Unicef busca reflejar la situación que atraviesan las familias más vulnerables que se saltean una comida o en muchos casos se van a la cama sin cenar, después de haberse endeudado y dejado de comprar alimentos para sortear la falta de ingresos.

“En 9 de cada 10 hogares con niñas y niños, los ingresos no alcanzan para comprar la misma cantidad de productos básicos que en 2023, de acuerdo con nuestra octava encuesta sobre la situación de la niñez y adolescencia en Argentina”, señala Unicef.

Si bien se apunta a los efectos de una pobreza de larga data, los datos de esa octava encuesta reflejan el recrudecimiento de la situación en los últimos meses: 10 millones de chicos y chicas comen menos lácteos y carne en este 2024 que en 2023.

En un 52% de los casos los hogares tuvieron que dejar de comprar algún alimento por falta de dinero, 11 puntos más que en 2023 y el valor más alto de toda la serie (iniciada en 2020), según advierte el informe. Esto implica que en 3,3 millones de hogares en donde viven casi 7 millones de chicas y chicos se compra menos comida que el año pasado.

(DIB)