Vecinos y vecinas del sur marplatense volvieron a vivir a diario una pesadilla para volver a casa o para ir a trabajar. Hoy denuncian que la empresa Costa Azul no respeta ni frena en las paradas de colectivo que le corresponden, lo que convierte en una odisea la vuelta a casa. Surge el temor por no contar con transporte este domingo de elecciones. 

“Acaba de dejar varados a vecinos en Juan B. Justo y Güemes el de las 18 que va para Miramar. No es la única vez que nos dejan pagando” dijo un vecino del sur a MdpYa. Las frecuencias de una de las pocas líneas que llegan al extremo sur marplatense con una tarifa diferenciada parecieran no estar modificadas. El problema es que, a pesar de contar con asientos disponibles, no frenan en las paradas, por lo que vecinos y vecinas quedan igualmente varados lejos de su hogar. 

“Pensá que el 511 que va a Chapadmalal y el Costa Azul más o menos pasan en el mismo horario, con diferencia de cinco minutos, y últimamente no están parando” comentó otra vecina a este medio. Todo tipo de previsibilidad y organización familiar terminan en la basura por diferencia de segundos y por falta de voluntad. “No hay control”, sentenció la mujer.

Y es que las opciones que quedan disponibles para quienes no tienen vehículo suenan desalentadoras: “La otra vez vino una vecina que trabaja allá (en el centro marplatense) a las 9 de la noche no le paró el colectivo”, ilustró la mujer a MdpYa. Las soluciones, por lo pronto, parecen ser dos: “tenes que tomar un remis de cinco lucas o estar parado una hora en la parada”, dijo. 

Además de ser un problema que necesita una solución integral, preocupa por lo pronto la disponibilidad del servicio de transporte para este domingo de elecciones: “Lo importante también es que que haya bondis para ir a las elecciones, porque, por ejemplo, yo soy fiscal acá en Chapadmalal, y ha venido gente que es del otro Chapadmalal de Estación”, ilustró. No llegan. Sin transporte público, en el sur marplatense, se agotan las opciones para ejercer el acto democrático de votar y fiscalizar.

“Hay que asegurarse que haya bondis con frecuencias, este ya tiene una frecuencia de cada una hora, imagínate que achiquen. Hay gente que a mitad del camino dice no, mejor no voy a votar nada, pago la multa, porque es re poco lo que hay que pagar por no votar” dijo la vecina a MdpYa, alarmada por cómo la ineficacia de un servicio privatizado pueda afectar al ejercicio democrático del sufragio, y, finalmente, al resultado de las elecciones en los establecimiento autorizados del sur.

Puntualmente, los barrios afectados por esta falencia son: Acantilados, Marisol, Playa Los Lobos, Playa Estafeta, Santa Isabel, San Eduardo del Chapadmalal, Marquesado y San Eduardo del Mar. Zonas del sur con creciente cantidad de obras de construcción para vivienda y comercio que hoy no cuentan con la conexión necesaria.

“Si la empresa no toma medidas iremos a la Defensoría del Pueblo y al Ministerio de Transporte de la provincia”, anticipó otro vecino a este medio. Hasta el momento de esta publicación, Costa Azul no había normalizado su servicio.