La fiscal Florencia Salas ratificó su hipótesis investigativa después de que prestara declaración en Cámara Gesell la adolescente de 14 años que denunció haber sido víctima de un abuso sexual por parte de cinco jóvenes durante la madrugada de Año Nuevo en el camping miramarense “El Durazno”, que está sobre el kilómetro 1 de la ruta 11.
Al responder algunas consultas de la prensa, la funcionaria judicial sostuvo que el testimonio que aportó a la causa la joven, que se extendió durante casi una hora, mantiene “incólume” la acusación sobre los cinco jóvenes que están sospechados de participar en el hecho. “Lo único que puedo decir es que no variará mi hipótesis a partir de este testimonio”, aseveró.
Salas explicó que, previo a la realización de la Cámara Gesell, ya se había mantenido una entrevista privada con la menor y una psicóloga, en donde se pudo determinar que “estaba en condiciones de declarar”. “Esto consiste en un relato libre, y después hay unas preguntas orientativas de nosotros para poder esclarecer distintas cuestiones”, detalló, sobre la dinámica de la Cámara Gesell.
Salas reveló también que ordenó realizar nuevas testimoniales para la próxima semana, después de que mantuviera una entrevista este jueves con la madre de la víctima, en la que se “ampliaron algunos detalles más” del caso.
La fiscal, en tanto, dijo que la cantidad de coautores que habrían intervenido en el ataque sexual “se determinará exclusivamente” con los resultados que arrojen las pericias, que ya tienen fecha prevista para la semana que viene.
A menos de una semana del inicio de la investigación, la fiscal se mostró “conforme” con el avance de la causa y el respaldo que obtuvo de los distintos actores y organismos de la Justicia. “Es muy difícil lograr una Cámara Gesell en tan poco tiempo porque se tiene que movilizar todo el Poder Judicial pero tuve colaboración de nuestra Fiscalía General para poder materializarla”, resaltó.
